Denunció que lo quemaron en celda de El Huecú

Lo habían demorado por no tener documentos.

Leonardo Petricio

NEUQUÉN (AN).- Se encuentra internado en terapia intermedia, con quemaduras de distinto grado, un joven de 24 años que denunció haber sido quemado por la policía en una celda de la comisaría de El Huecú. Mario Muñoz, padre de Pablo, el joven quemado, dialogó con “Río Negro” en la sala de espera del cuarto piso del Hospital Castro Rendón, donde desde el viernes pasado se encuentra internado su hijo. Pablo es empleado en Zapala de un empresario que comercializa verduras en el interior de la provincia. El jueves pasado, el joven junto a un chofer viajaron a El Huecú donde estuvieron trabajando durante toda la jornada. Si bien tenían previsto hacer noche en la localidad, una discusión entre Pablo y el chofer cambió los planes. “Pablo decidió volver a Zapala a pie. Cuando ya había caminado unos 10 kilómetros, un móvil de la policía lo demoró y como mi hijo tiene el documento en trámite lo llevaron a la comisaría para identificarlo”, contó el hombre. Muñoz reconoció que su hijo habría ofrecido resistencia, pero finalmente accedió a ser demorado hasta que los efectivos confirmaran sus datos. Mientras tanto, el joven quedó en el interior de una celda donde lo despertaron las llamas, a eso de las 2 de la madrugada. “Me contó que se despertó y se dio cuenta de que se estaba quemando en distintas partes del cuerpo”, relató el padre del joven. Por eso fue trasladado en primera instancia al hospital de El Huecú, de donde lo derivaron a Zapala y posteriormente al Hospital Regional Castro Rendón. El joven presenta, de acuerdo con el parte médico que recibió la familia, quemaduras severas en el rostro, las manos y los glúteos además de tener comprometidas las vías respiratorias. Por esta situación Mario Muñoz contrató un abogado y ayer radicaron la denuncia por apremios ilegales en la Fiscalía General contra el personal de la guardia de la comisaría de El Huecú. “Esto fue prácticamente una tentativa de homicidio de parte de los policías”, aseveró el hombre. Un sargento y un agente Por su parte, Esther Arias, la madre de Pablo, explicó que a ella le avisaron de la situación de su hijo por mensaje de texto y desde Zapala se vino con él en la ambulancia. “Me dijo que los policías que lo quemaron son un sargento ayudante y un agente, y que si los ve los reconoce. Quiero que estos policías vayan presos porque no puede ser que maten o que hagan lo que sea y que después anden caminando como si nada”, dijo furiosa la mujer. La familia de Muñoz fue recibida en Neuquén por la fiscal de Graves Atentados contra las Personas, Sandra González Taboada, y se supo que por una cuestión de jurisdicción un fiscal de Chos Malal habría iniciado una investigación en forma paralela a la denuncia radicada en la Fiscalía General de esta capital.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios