Federal A: Cipolletti cambió, ganó y salió del fondo

Federal A

La victoria de Cipolletti apagó una olla a presión. El Albinegro logró establecer diferencias -primero en el resultado y después en el juego- ante Ferro de Pico (2 a 0) por la fecha 4 del Federal A.

Ulises Romero tuvo el desparpajo y la personalidad para encabezar una levantada que por ahora es insipiente, pero al menos descomprime el ambiente.

El primer tiempo no fue distinto a lo que el equipo venía mostrando. Apenas la actitud de Ulises Romero para pedir el balón y la calidad de Germán Weiner fueron para destacar. En 45 minutos hubo solo una situación de gol por lado.

En la suya, Cipo insinuó algo del fútbol que pretende tener y que sus hinchas quieren ver. La combinación de cuatro futbolistas derivó en Lucas Comachi llegando al área rival. Su remate salió ancho al lado del palo derecho de Humeler.

Del otro lado, Caprio tuvo que sacar un tiro libre complicado. Si bien la pelota iba al palo del arquero, Nicolás respondió con la sobriedad que lo caracteriza.

Luego del descanso, el trámite cambió por el gol de Romero, que empujó la pelota en la línea luego de una atajada de Humeler. Cabe mencionar que la jugada previa también fue colectiva.

La modificación posicional con Pablo Vergara jugando por el medio le dio más compañía a Romero. De hecho, el zurdo número 11 comenzó la acción del tanto que convirtió su compañero.

Desde allí, el Albinegro creció ante un rival al que se le cayó el castillo de naipes que había pensado en la previa. Como suele suceder con los equipos que llegan al alto valle, Ferro especuló hasta donde pudo. En cuanto sufrió un gol, se notaron todas las grietas.

Vergara desbordó por derecha y su centro fue anticipado por Maxi Herrera en el primer palo para estampara el segundo.

El partido quedó liquidado, y Cipo estuvo más cerca del tercero que su rival del empate.

La comunidad del Capataz espera que esta victoria ayude para descomprimir la tensión de las últimas semanas por los malos resultados y le de mayor soltura a un plantel que venía muy presionado y quiere demostrar su potencial.

El entrenador movió tres piezas para el partido de ayer. Esos cambios fueron importantes, porque de a poco Cipolletti ganó en dinámica y terminó de destaparse con el gol.

Justamente, el tanto fue marcado por uno de los ingresados. Ulises Romero tuvo el olfato, el optimismo y la fe que al Capataz le faltaba. Su juventud y las características futbolísticas del creativo contribuyeron a abrir el marcador y cortar un karma que parecía interminable.

Germán Weiner no descolló, pero con un par de toques demostró que tiene argumentos para que Zwenger lo considere como titular.

Matías Carrera tampoco hizo su mejor partido, pero mejoró con el equipo durante el segundo tiempo y cerró su carril las pocas veces que lo atacaron.

Un detalle no menor, donde también influyó la decisión del técnico fue el cambio táctico del entretiempo, cuando Vergara dejó la banda izquierda y se movió por el centro del campo. Esa presencia en la zona de creación tuvo incidencia directa en el resultado, ya que el zurdo participó de los dos goles. En definitiva, las variantes le dieron resultado.

Datos

curiosos

La escasa concurrencia de ayer en la Visera dejó una certeza: el equipo deberá contagiar desde adentro hacia afuera para volver a poblar las tribunas.