Ginóbili, el hombre de las cuatro décadas para quien cada partido puede ser el último.

“Respiro hondo antes de cada juego, disfruto y valoro dónde estoy”, declaró Manu, quien lucha junto a su equipo San Antonio Spurs por ingresar a los playoffs de la NBA

En plena recta final de la fase regular, peleando junto a los San Antonio Spurs por ingresar a la postemporada, Emanuel Ginóbili, el hombre de las cuatro décadas que sigue brillando en la NBA, consideró que “cada partido puede ser el último, porque estamos muy cerca del final de la temporada. Respiro hondo antes de cada uno, disfruto y valoro dónde estoy. Trato de frenar un poco”, comentó Manu, en una entrevista con TyC Sports.

El bahiense aseguró que junto a los Spurs está ante una situación atípica: “Estamos luchando por entrar a los playoffs, una dificultad que nunca habíamos tenido”.

“Me gusta hacer lo que hago”, dijo Ginóbili en otro tramo de la entrevista. “De los 82 partidos que jugaremos, va a haber 5 o 10 en los que esté con dolores, cansado, pero es un lindo desafío”

La sabiduría que le ha dado la experiencia, le permite hoy a Ginóbili tomar las cuestiones del éxito de otra manera. “Antes era otro juego, otra mentalidad y otra forma de vivir el partido, que si gano es espectacular y si pierdo me quiero matar. Ahora voy, si gano mejor y sino me lo tomo más relajado”.

San Antonio viene de ganarle a Golden State Warriors, los actuales campeones de la NBA, donde Ginóbili quedó como el tercer máximo reboteador de la franquicia texana. Manu, que sigue haciendo historia, aportó dos rebotes para alcanzar los 3.672.

El bahiense se mostró feliz y agradecido por las muestras de afecto de los argentinos que viajan a verlo jugar, algo no muy usual entre los jugadores extranjeros en la NBA. “Se ve que se pusieron de acuerdo y aparecieron en banda. Acá eso no es normal y estuvieron hablando toda la semana de eso. Les cuesta entender. Lo valoro y lo aprecio porque me imagino el esfuerzo que hace la gente por venir”, agregó. “Se ve que esto de estar jugando a los 40 y todo lo que pasó con la selección, que cada vez quede menos tiempo, hizo que la gente se animara a venir a ver los partidos”.