Mannara vive a pleno su revivir futbolístico en el Depo

Federal A

Nada debe ser más gratificante para un jugador de fútbol que poder seguir siendo útil a su equipo cuando ya muchos han colgado los botines. A los 38 años, Rodrigo Mannara es de aquellos jugadores que está en condiciones de celebrar aún su valía dentro de un campo de juego.

El delantero jugó su mejor partido desde que está en Deportivo Roca. El último domingo fue la figura del equipo en la gran victoria por 4-1 sobre Ferro de Pico. Un triunfo que llegó en el momento justo para devolverle al Naranja la posibilidad de seguir en la pelea en el Grupo A de la zona campeonato.

“Merecíamos el triunfo más que nadie. No podíamos estar últimos en la tabla después de todo el esfuerzo que habíamos hecho por clasificar”, tiró el delantero, ahora en su versión de media punta, autor de un gol y dos asistencias. “Mauro (Laspada) me tira más por afuera, así que tengo que hacer un mayor esfuerzo físico jugando de extremo. ¿Si fue mi mejor partido acá? Creo que sí porque pude mantener un nivel en todo el encuentro. Ahora estoy mucho mejor físicamente”, reconoció el experimentado futbolista.

No fue fácil el andar de Mannara en el Depo, al que llegó a fines de julio del año pasado. Su aporte para el equipo fue de menor a mayor y la mejoría de su juego corrió a la par de su forma física. Su despliegue y lucidez para resolver situaciones favorables (fue el asistidor en los últimos dos goles), principalmente en el complemento, fueron determinantes para que el Depo cerrara el partido ante los pampeanos.

Mannara es un tipo temperamental dentro de la cancha, a tal punto que todas las amarillas que sumó en el torneo, fueron por estar prendido en cada tumulto que se presenta en el campo. “Afuera soy tranquilo…”, afirma entre risas Rodrigo. Y agrega: “No soy de pegar patadas y esas cosas, pero vivo los partidos con intensidad. Los jugadores de Ferro son bravos… te hablan todo el tiempo. Pero son cosas que quedan en la cancha. Soy calentón, pero termina el partido y se acaba todo”.

Por llegar a la quinta amarilla ante Ferro, Mannara no podrá estar ante Villa Mitre en la próxima fecha.

Sigue rodando…

“No es muy común que te llamen cuando tenés esta edad. Mi hermano Pablo es amigo de Laspada y le aseguró que le iba a servir. La verdad es que el técnico me dio una gran chance de regresar al ruedo. Le voy a estar agradecido siempre. Comencé teniendo 10 o 15 minutos. De a poco fui recuperando mi mejor forma física y también tuve más protagonismo”, afirma Mannara quien bajó ocho kilos desde que llegó al Naranja, un color que lo ha marcado en su carrera profesional.

“Mi mejor momento futbolístico lo pasé en Cobreloa, que también viste de naranja, donde hice como 50 goles”. Las vueltas de la vida lo trajeron al Depo. “Otra vez con una naranja… Estoy muy contento poder ayudar al equipo a la edad que tengo. Si vos me preguntas hasta cuándo, te digo que estoy para un par de años más. De algo estoy seguro: hasta que me de el cuerpo, voy a seguir”.

Se vienen dos duelos

clave fuera de casa

La victoria lograda por Deportivo Roca el último domingo en el Maiolino ante Ferro de Pico (4-1), le dio posibilidades al Naranja de seguir con vida en la segunda fase. Se sabe que quienes pasen de fase serán los dos primeros de cada uno de los 2 grupos de la zona campeonato y el mejor tercero. Es por eso que el Naranja deberá sumar indefectiblemente de visitante para aspirar a la clasificación.

Se vienen dos partidos fuera de casa para el equipo de Mauro Laspada. El primero de ellos será ante Villa Mitre este domingo, quien marcha último con una unidad. Luego el Naranja viajará a San Juan para jugar ante Desamparados. En la última jornada (la 2ª fase es a sólo una rueda) recibirá a Alvarado, quien anoche jugaba su partido de la 4ª fecha ante Gimnasia de Mendoza.

“Fer (Fernández) falló con Villa Mitre y la posta la tomó Nico (Trecco), que marró con Cipolletti. Así que ahora yo soy el encargado de patear los penales”.

Rodrigo, que marcó ante Ferro, contó que en Roca el que erra cambia.