Narváez, sin ninguna chance contra Tete

Es un grande del boxeo, pero todo tiene un límite. Y los años pasan. Omar Narváez no pudo alcanzar la proeza de convertirse en el primer argentino en ganar tres campeonatos del mundo en diferentes categorías, al perder por puntos en decisión unánime con el sudafricano Zolani Tete. Estaba en juego la corona gallo de la Organización Mundial, en una pelea que se disputó en Belfast, Irlanda del Norte.

Las tres tarjetas de los jurados marcaron la abrumadora superioridad de Tete a lo largo del combate: 120-108. El argentino no ganó una sola vuelta.

Tete dominó el centro del ring de principio a fin y no le dio chances al de Trelew, que tampoco mostró la garra y la entereza que lo caracterizaron a lo largo de su carrera para buscar la hazaña.

Excampeón mundial de peso mosca y supermosca, una de las estrellas del boxeo argentino del siglo en curso y para muchos incluso uno de los mejores exponentes de todos los tiempos (entre luminarias como Monzón, Pascual Pérez, Locche y Víctor Galíndez), el Huracán desperdició la que fue seguramente su última carta grande.

El sudafricano (oriundo de Ciudad del Cabo pero afincado en el Reino Unido ), dominó a voluntad y sacó provecho de dos diferencias categóricas: es 12 años menos y 16 centímetros más alto.

De hecho confirmó el favoritismo que tenía en la teoría y también en las apuestas, que pagaban 13 a 1 por una victoria del argentino.

Narváez ya había intentado ganar el título en peso gallo el 22 de octubre de 2011, cuando cayó por amplio margen de puntos con Nonito Donaire en el Madison Square Garden de Nueva York. Y su tercera derrota fue el 30 de diciembre de 2014, cuando cedió el supermosca ante Naoya Inoue, por nocaut en el segundo ( su única caída por nocaut). Ayer fue la tercera y todos se preguntan: ¿fue su última función?

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