Desahogo y dedicatoria

«Estemos atentos y tranquilos. Muchachos, demuestren lo que pueden dar por la camiseta», les dijo Maradona a sus dirigidos antes de salir al estadio Centenario, en una charla técnica que básicamente fue una arenga.

Maradona vivió con calma el primer tiempo, al ver que sus jugadores cumplían al pie de la letra el planteo previo. Claro que la tranquilidad se fue esfumando con el correr de los minutos, y todo fue éxtasis cuando Bolatti marcó el gol de la victoria.

Una vez que el árbitro Carlos Amarilla marcó el final, un Diego afónico y desafiante gritó a cuatro vientos: «les pedí que explotaran, y explotaron, dejaron todo. Se lo dedicó al plantel, a la gente y a los que estuvieron conmigo. A nadie más». Y enojado por las críticas de los últimos tiempos, antes de irse del campo de juego tiró sin reparos: «Que la chupen y que le siguen chupando», frase dirigida a algunos periodistas. «Tengo que hacerme muchas autocríticas, pero me las dijeron todas ustedes. No me gustan los que son malintencionados…», dijo ya en conferencia de prensa.

Ante los micrófonos de la sala, algo más tranquilo, el entrenador de la selección puntualizó que el equipo «entendió el partido desde el primer momento. Lo plantearon tal como lo habíamos charlado en la concentración. Mantuvieron la posesión del balón y no se confiaron en ningún momento. Estoy muy orgulloso del equipo. Fue muy distinto a lo que pasó en el ST ante Perú, donde perdimos completamente el orden», se sinceró Diego.

El técnico también hizo un balance de su gestión al frente de la albiceleste. «Mi tiempo en la selección es positivo al máximo. Pude tener a estos jugadores a mi disposición, que juegan con el corazón y son muy profesionales. No es que están sólo llenos de plata y no vienen a poner todo para jugar en la selección», afirmó.

Maradona también tuvo palabras elogiosas para con Marcelo Bielsa, DT de Chile que superó a Ecuador e hizo su parte para las aspiraciones argentinas. «Quiero mandar mis felicitaciones a Bielsa. Cuando perdimos con Paraguay (en Asunción, 1-0) me llamó y me dijo que tuviera tranquilidad. Sólo con una llamada en el momento justo, uno puede entender qué tipo de persona es».