Diablura copera

Copa Libertadores

No fue la mejor noche de Independiente en cuanto a la futbolístico, pero el resultado le cerró para viajar tranquilo a jugar la vuelta a la altura de Ecuador. El Rojo venció por 2-0 a Deportivo Quito y quedó a un paso de meterse en el grupo 8 de la Copa Libertadores, donde esperan por el cuarto integrante Peñarol, Liga de Quito y Godoy Cruz.

El equipo de Avellaneda fue superior durante los 90’, pero falló a la hora de la gestación de las jugadas de ataque y mostró ciertos desacoples en defensa. Una buena: los autores de los goles, ambos en el ST, fueron Matías Defederico y Patricio Rodríguez; el primero debutó y marcó oficialmente con la casaca del Rojo, y el segundo dejó atrás una larga racha sin convertir.

Antonio Mohamed plantó un equipo que en la previa sonaba a bien ofensivo, con tres defensores, una línea de cuatro volantes y Defederico-Parra-Silvera como trío de generación y conclusión de los ataques. El Rojo tuvo el balón siempre, pero le costó destruir el muro defensivo que construyó Fabián Bustos.

Deportivo Quito pasó pocas veces la mitad de la cancha, e incluso el rionegrino Maxi Bevacqua apenas si tocó una pelota en la primera media hora.

Pero Independiente tampoco llegó con claridad, se repitió en jugadas frontales, y dejó que los ecuatorianos crecieran.

Una de las más claras del local sucedió sobre los 36, cuando Nicolás Cabrera escaló por el sector derecho, dejó en el camino a Saritama y Mina, pero su disparo no terminó en la red por una salvada providencial de Checa. Si esa levantó un buen ‘uh’, qué decir del remate de Defederico que se fue lamiendo el palo derecho.

Pero el reloj siguió corriendo, el Rojo llegó varias veces hasta la puerta del área rival pero nunca pudo resolver con precisión.

El complemento se inició de la misma forma que acabó la primera parte, pero con una diferencia: Independiente fue propietario del balón y pegó a los 4’, cuando Silvera tomó un rebote, lanzó un centro desde la izquierda, un defensor visitante rechazó muy mal y Defederico se llenó la boca de gol con un perfecto disparo de tres dedos.

Independiente siguió buscando en el arco de enfrente y por eso a veces se descuidó atrás. El susto más grande que se llevaron sus hinchas se produjo a los 18, cuando Hilario Navarro le ganó en un mano a mano a Luis Perea (reemplazó a Bevacqua) y en el rebote el “Avispa” Velázquez sacó la pelota en la línea.

Cuatro minutos más tarde el veterano Elizaga le ahogó el grito de gol al Cuqui Silvera, pero el arquero nada pudo hacer sobre los 25, cuando cayó en su área una pelota parada, ninguno de sus defensores consiguió rechazar y el Pato Rodríguez empujó al gol.

El Diablo siguió atacando y el tercero casi lo convierte Parra, de no ser por la rápida salida de Elizaga. También tuvo el descuento Deportivo Quito, a los 30, pero el disparo de Perea fue a parar manso y tranquilo a las manos del siempre seguro Navarro.

El mismo Parra tuvo una clarísima en el final, tras una gran jugada de Rodríguez, pero el ‘1’ rival volvió a estar acertado.

El Rojo buscará abrochar su continuidad en la Copa el próximo martes en la altura de Quito.