Dos rionegrinos por día denuncian ser maltratados

VIEDMA (AV).- Las denuncias por violencia familiar bajaron un 12 por ciento en el 2004. Igual, dos rionegrinos diariamente se presentan en la Justicia porque son víctimas de maltratos físicos o psíquicos en sus grupos familiares. La mayoría de estas causas judiciales -siete de cada diez- tienen participación de menores, aunque el registro del año pasado consignó que esa presencia cayó a un 60 por ciento.

Los cuatro juzgados de Familia de Río Negro sumaron 787 causas iniciadas por la ley provincial 3040 de Violencia Familiar. Esa estadística proyecta más de 2,2 denuncias por día. El total anual representa una caída del 12 por ciento en relación al 2003. Las bajas de las presentaciones se advierten en Cipolletti (35 por ciento), Bariloche (19 por ciento) y Viedma (12 por ciento). En Roca, las acciones judiciales por violencia familiar crecieron un 31 por ciento.

Actualmente, en las comisiones de la Legislatura se evalúan y debaten reformas a la ley 3040, proyectándose mayor participación para los juzgados de Paz y los organismos del Ejecutivo. De las 787 denuncias de 2004, 474 causas ingresaron con presencia de menores, lo que equivale a un 60 por ciento.

Esa participación es baja en comparación con los promedios anuales. Las estadísticas suman 3.099 denuncias en los años 2001, 2002 y 2003. De las cuales 2.186 involucraron a menores, es decir un 70 por ciento del total. El mayor índice se advierte en el 2002: un 78 por ciento de las presentaciones tenían menores involucrados.

La ley 3040 fue sancionada hace 9 años y establece el «marco preventivo y el procedimiento judicial a seguir para la atención de situaciones de violencia familiar» que se produzcan en Río Negro. En relación a lo judicial, la norma protege a «toda persona que sufriere daño psíquico o físico, maltrato o abuso por parte de algún integrante del grupo familiar».

En principio, las presentaciones se podían formalizar ante jueces en lo Civil, pero desde el 2002 se crearon específicamente los juzgados de Familia.

Las denuncias además se pueden formalizar ante un Juez de Paz. Actualmente, la Legislatura evalúa reformas planteadas por el Superior Tribunal de Justicia, que incluyen la ampliación de las facultades de esos Juzgados en estas cuestiones. Según la normativa de 1996, la presentación puede ser verbal o escrita, con o sin patrocinio letrado. El procedimiento es gratuito, sumarísimo y actuado.

El Juez -según la ley- requerirá «un diagnóstico de interacción familiar efectuad por peritos de diversas disciplinas para determinar los daños físicos y psíquicos sufridos por la víctima, la situación de peligro y las condiciones socio-económicas y ambientales de la familia».

Asimismo, se faculta al juez para ordenar «la separación del grupo familiar» a quien «considere conveniente si halla que la continuación de la convivencia significa un riesgo para la integridad física o psíquica de alguno de sus integrantes». En este caso, las modificaciones en análisis podrían excluir la separación de la víctima de su grupo familiar.

También, la norma vigente permite al magistrado establecer prohibiciones para el denunciado para «evitar la repetición de actos de violencia».

En caso de que la víctima fuera un niño, adolescente, anciano o discapacitada, el magistrado «otorgará la guarda a quien considere idóneo». Aún así, la norma propone «agotar todos los recursos para que permanezcan en su hogar».