Duro cruce gobierno-gremio por paro de trenes

BUENOS AIRES (DyN) – Un paro sorpresivo dispuesto ayer por maquinistas de las líneas de trenes San Martín y Belgrano Sur dejó varados a miles de usuarios, mientras el gobierno advirtió que no se dejará “extorsionar” por el gremio La Fraternidad, al que prevé sancionar tras atribuir la huelga a “cuestiones políticas”. El ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, se manifestó “harto” de la actitud sindical al asegurar que “algunos motorman cobran 50.000 pesos” y dijo que si no logra avanzar con la reforma del sistema ferroviario dejará el cargo. “No me quieran extorsionar, conmigo no van a joder, están tomando de rehén a la gente”, aseveró a radio La Red desde Nueva York, donde visita una planta donde se construyen trenes. Randazzo agregó que “hay una decisión de este gobierno que es mejorar el servicio a mi no me van a correr los dirigentes sindicales. Esto tiene una connotación política porque se hace después de la decisión de imputar al motorman por el accidente en Castelar”. “Si me tengo que ir del cargo porque no puedo llevar adelante las modificaciones, ninguna duda. Pero les va a ser difícil, estoy por encima de la corporación sindical”, sostuvo. El funcionario dijo que el paro, que se extendió entre las 6 y las 10, en las líneas ferroviarias San Martín y Belgrano Norte fue “absolutamente salvaje, vergonzoso, aduciendo argumentos falsos”. Randazzo también rechazó declaraciones del secretario general de La Fraternidad, Omar Maturano, quien afirmó que incluso los maquinistas pueden conducir si “toman cocaína”, al justificar la medida de fuerza en la falta de controles médicos y psicológicos al personal ferroviario. “Es una barbaridad lo que está diciendo no tiene sentido. La resolución de los controles lo puse en marcha yo. Se controla alcohol en sangre, se hace el test de consumo de droga. Lo que dice es de una caradurez nunca vista”, afirmó. El secretario de Transporte, Alejandro Ramos, aseguró que habrá sanciones para el sindicato. En tanto, Maturano dijo que “hace días que venimos pidiendo que los exámenes psicológicos los haga un médico. Una enfermera no puede hacer los exámenes psicológicos. Las empresas no respetan la resolución del ministro de Transporte (Florencio Randazzo), no quieren gastar”. Tras exigir que “la resolución del gobierno nacional se cumpla por completo”, dijo que “dilatación de pupilas no nos toman” y sostuvo que “cualquiera que haya tomado cocaína puede ir a trabajar al otro día”. “Queremos verdaderamente que nos tomen todo y las empresas cumplan con todo y el ministerio de Transporte cumpla con todo. Venimos pidiendo que pongan los médicos y psicólogos que deben estar en las puntas de estación. El examen (psicológico) se basa en lugar y tiempo. Son preguntas. Las tiene que tomar un médico, un psicólogo, no una enfermera. Igual te dejan salir con el tren”, afirmó. Al ser consultado sobre las posibles sanciones al gremio por el paro, Maturano respondió: “Que las pongan. Nosotros no escapamos a las sanciones. Nosotros queremos que nos saquen sangre, que nos hagan el control de dilatación de pupilas, que lo que tengan que hacer, que lo hagan”. Maturano dijo que para que se pueda hacer “un estudio completo” de los maquinistas se necesita “una hora”. “Nos quieren sacar sangre, que nos saquen sangre y al compañero que incumple que lo saquen de servicio. Si toma droga que lo pongan en una granja y se cure, lo mismo si es alcohólico”, indicó. El líder de los conductores de trenes se quejó porque no cuentan con simuladores como sí tienen los pilotos de aviones y lanzó: “Estamos practicando con los pasajeros”. El gremialista explicó que los conductores novatos realizan su primer viaje acompañado por un conductor con más experiencia, pero luego quedan a cargo de las formaciones sin tener la experiencia necesaria.

Los pasajeros fueron otra vez los principales perjudicados por la sorpresiva medida del sindicato.