La Reserva Federal y otros cinco bancos centrales acuerdan inyectar liquidez para evitar una crisis global
La quiebra del Silicon Valley Bank y el rescate forzoso del Credit Suisse, pusieron en jaque la estabilidad del mercado financiero internacional. La FED junto a las principales entidades monetarias del mundo, decidió anticiparse al escenario y garantizar la disponibilidad de fondos.
FED. La Reserva Federal de los EEUU no tocó los tasas de interés.
Las seis entidades monetarias más importantes del mundo anunciaron este domingo una acción conjunta para garantizar la liquidez del sistema financiero global. Así lo comunicó oficialmente la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED), junto al Banco de Canadá, el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón, el Banco Central Europeo y el Banco Nacional Suizo.
La inyección de liquidez se instrumentará a través de acuerdos permanentes de líneas de intercambio (swaps de liquidez) en dólares estadounidenses, y según informaron las entidades en un comunicado oficial emitido por Washington, la medida busca «mejorar la efectividad de las líneas swap para proporcionar financiamiento en dólares estadounidenses».
La noticia surge luego de una furibunda semana de los mercados financieros que incluyó la quiebra del Silicon Valley Bank, asociado a las startups tecnológicas de todo el mundo, y al rescate forzoso del Credit Suisse el pasado domingo, evitando lo que pudo ser un efecto cascada del sistema bancario internacional.
La debacle de uno de los bancos más emblemáticos de Europa fue la noticia del fin de semana, y las autoridades monetarias suizas apresuraron las decisiones a fin de evitar la incertidumbre en la apertura de los mercados del día lunes.
El anuncio de la FED aclara que la disponibilidad de fondos es permanente y que el mecanismo de swaps simplemente pretende agilizar la operatoria y fortalecer el sistema financiero.
El UBS Group se hará cargo de la entidad suiza a cambio de unos u$s 3.200 millones, mientras que la Confederación Suiza respaldará la operación con una garantía de u$s 9.000 millones, a fin de contener el riesgo que implica para UBS la absorción del Credit Suisse.
No obstante, pese al anuncio del domingo por la tarde, los mercados han acusado el golpe y se muestran a la baja en la mañana europea del día lunes. Tanto las acciones del Credit Suisse como las de UBS se desplomaban un 60% en la apertura de la bolsa suiza y en la pre apertura de Wall Street.
El anuncio de la FED y los bancos centrales de las potencias globales aclara que la disponibilidad de fondos es permanente y que el mecanismo de swaps simplemente pretende agilizar la operatoria y fortalecer el sistema financiero.
«La red de líneas de canje entre estos bancos centrales es un conjunto de facilidades permanentes disponibles y sirve como un importante respaldo de liquidez para aliviar las tensiones en los mercados de financiación global , ayudando así a mitigar los efectos de tales tensiones en la oferta de crédito a hogares y empresas», explica el comunicado conjunto emitido por la FED.
Eufemismos con los cuales las entidades monetarias más importantes del mundo corrieron a intentar dar garantías, buscando anticipar un escenario de pánico financiero global. Un escenario que por cierto ya está presente y amenaza convertirse en una crisis de dimensiones aún desconocidas.
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