El agente baleado en Cipolletti está consciente, pero su estado es delicado

CIPOLLETTI (AC).- El policía que el viernes fue herido por un delincuente durante un control de identificación de personas y vehículos en esta ciudad, permanece internado en terapia intensiva y aunque su estado es delicado, está estable y es consciente de lo que le ocurre. Una junta médica resolverá hoy cómo sigue su tratamiento.

Como se sabe, el disparo que recibió en el abdomen afectó un riñón, parte del intestino grueso, el bazo y una vértebra.

El policía Miguel Lezcano, de 23 años, fue herido por un sujeto que resistió a los tiros un procedimiento policial.

Con un arma calibre 9 milímetros realizó al menos ocho disparos, uno de los cuales dio en el abdomen de Lezcano, que no llevaba chaleco antibalas para protegerse.

El delincuente también fue herido en el enfrentamiento, aunque sin riesgos para su vida.

Ayer Lezcano fue llevado al quirófano del hospital de Cipolletti para ser sometido a una limpieza de la zona afectada -la intervención del viernes no fue suturada-, a modo de prevención de infecciones.

El joven policía, que respira con asistencia, puede escribir, a pesar de su delicado estado, y se comunica con sus familiares con movimientos de cabeza.

Por eso se sabe que está consciente y que, dentro de las circunstancias, tiene ánimos para recuperarse, según se informó.

Hoy se reunirá una junta médica del hospital para evaluar la evolución del paciente y si todo resulta como se espera que suturarán mañana el abdomen.

El juez penal de Cipolletti, Guillermo Baquero Lazcano, instruye la causa que se abrió por este episodio, y que dejó también al presunto agresor herido.

Al parecer, el delincuente manejaba un auto cuyo acompañante nada tendría que ver con él; sólo pretendía recuperar una moto que le habían robado hacía unos días a un familiar en Neuquén.