«El bola»: La amistad al rescate de un niño maltratado

NEUQUEN (AN).- Pablo tiene 12 años, es inteligente, despierto pero taciturno y solitario. Continuamente se lo ve jugando con una bolita que hace girar entre sus dedos. En apariencias es un chico normal, pero detrás de su rostro inocente se esconde una dura realidad: es una de las tantas víctimas del maltrato familiar. «El Bola» del español Achero Mañas revela cómo el entorno familiar va determinado la personalidad de un chico y como él encara su propio crecimiento.

Pablo, apodado «el bola» vive inmerso en una atmósfera violenta y sórdida. Su situación familiar, que oculta avergonzado, lo incapacita para relacionarse y comunicarse con sus pares. En la escuela prefiere mantenerse al margen de los juegos de sus compañeros, pero fuera de ella se permite ciertos contactos amistosos.

Es un niño que cree, a pesar de su corta edad, que no tiene nada que perder. Vive al límite de todo, al borde del abismo todos los días. Uno de sus juegos preferidos es retirar de las vías una botella en el preciso instante en que pasa el tren.

El filme trata una problemática de la clase media española donde las apariencias muestran un mundo «normal», pero entre bambalinas la crudeza y el realismo impactan sin concesiones.

A medida que se desarrolla la historia, la llegada de un nuevo amigo, con quien «el bola» descubre la amistad y la posibilidad de conocer un modelo familiar completamente diferente, le darán las armas para reacomodarse en el mundo y el coraje necesario para enfrentar su propia vida.

En esta instancia, aparece un nuevo problema a resolver dentro de la película: el niño decide cambiar su historia hablando de lo que le pasa, pero los que están del otro lado, cómo hacen para ayudarlo y hasta dónde pueden entrometerse en una situación que, según las palabras de Mañas, «en la sociedad española es considerado intramuros».

Antes de la realización de este trabajo, el director y guionista ya conocía el entorno que pretendía registrar, al tomar contacto con chicos de centros asistenciales. Este dato le permitió superar con maestría sus propios prejuicios y desarrollar su idea con maestría y responsabilidad.

«El bola» cosechó este año, varios premios Goya como mejor película, mejor director novel, mejor actor revelación y mejor guión original. También como mejor guión ganó en el Festival de Sundance y recibió los lauros de Ocic en San Sebastián.

Achero Mañas, hijo del guionista, actor y dramaturgo Alfredo Mañas, se convirtió en uno de los actores más reconocidos de la generación española de los 90. Como director del cortometraje «Cazadores» logró en 1998 el premio Goya al mejor del año. Como actor trabajó en los filmes «El rey del río» de Manuel Gutiérrez Aragón», «Dispara» de Carlos Saura y «La ley de la frontera» de Adolfo Aristarain, entre otros. «El bola» marca su debut en el largometraje.