El efecto entre los barrenderos

CIPOLLETTI (AC).- Los trabajadores del servicio de recolección de residuos y barrido de calles de la ciudad fueron los más afectados por el atentado que el martes le costó la vida a Juan Domingo Maciel, uno de sus compañeros. Ayer retornaron a sus tareas, luego del asueto dictado por la municipalidad y cualquier bolsa o caja “sospechosa” les generó temores lógicos. Fue por ello que las calles cipoleñas no mostraron la limpieza de otras veces. “Hay que entender que el sistema de barrido de calles no es el mismo y no va a ser normal por un tiempo. El sistema de aseo de la ciudad está en emergencia”, reconoció el intendente Alberto Weretilneck. Pidió un cambio de conductas a la población para que acompañen a los trabajadores y al municipio en estas circunstancias. Más allá de anunciar que se iniciará una campaña de difusión sobre las maneras de sacar la basura a la calle para evitar preocupaciones.


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