El ex comisario Gabriel Capsi fue condenado a dos años en suspenso

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- En decisión acorde con la solicitud del fiscal Carlos López, la Cámara Primera del Crimen le impuso dos años de prisión en suspenso y cuatro años de inhabilitación especial al ex comisario Gabriel Capsi, en la causa por severidades que denunciaron dos internos a los que habría sancionado y alojado en una celda de castigo, de manera ilegal.

Los magistrados también ordenaron que la causa vuelva a la fiscalía de turno para que investigue la probable comisión de falso testimonio en la que habrían incurrido los funcionarios de la alcaidía que declararon ante la audiencia, dado que todos habrían respaldado la postura exculpatoria de Capsi.

La causa se inició en mayo de 2001, luego que el interno Pablo Aguayo fuera sancionado por insultar a un oficial, y recluido durante siete días en la celda 24 de la alcaidía. Aguayo denunció que el primer día estuvo desnudo, que sólo le dieron de comer tres de los siete días, que no pudo higienizarse y careció de jabón, toalla, papel higiénico y colchón, además de no tener luz ni calefacción.

La causa también contiene la denuncia de Nelson Robaina, que pocos días después fue alojado en la misma celda, por haber insultado a un celador que no le habría facilitado una cama.

Capsi negó las imputaciones, al igual que el personal de la alcaidía, en tanto que los denunciantes y otros internos se mantuvieron en sus dichos acusatorios.

Para el juez Alejandro Ramos Mejía, que redactó el primer voto, «el jefe de la unidad de ningún modo podía ignorar el estado en que se encontraba la celda 24, donde ordenó las ilegítimas sanciones y aislamientos». Agregó que «ningún justificativo encuentra su conducta en las reacciones que pudieran haber tenido y asumido Aguayo y Robaina, detenidos en la alcaidía local, en condiciones generales que se han descripto en los sucesivos amparos que los jueces de esta circunscripción hemos impulsado, y que pueden calificarse sin temor a exceso como de verdadero depósito de seres humanos, con flagrante violación a los más elementales derechos humanos».

En voto al que adhirieron sus colegas Alfonso Pavone y Marcelo Barrutia, Ramos Mejía subrayó que «fue en este contexto que Capsi agravó las ya de por sí insoportables condiciones de detención, aplicándole a los nombrados rigurosidades excesivas».