El gobierno culpa a los empresarios por la inflación

“Suben los precios en vez de invertir”, acusó Randazzo.

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El gobierno nacional reconoció ayer que “no hay dudas” de que “hay algunos incrementos” en los costos de algunos productos, pero culpó de esa situación al empresariado que “rápidamente apela” a la suba de precios en lugar de “aumentar la oferta y los servicios”.

Así lo planteó el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien consideró que “acusar al Gobierno de ser el que aumenta los precios, es un sinsentido”, y aseveró que “si hay algo que precisamente ha hecho” la gestión kirchnerista “es defender los bolsillos de los trabajadores”.

El debate por las discrepancias entre el índice oficial de inflación y las estimaciones privadas, que duplican o triplican las cifras del Estado hasta prever entre un 23 y un 27% de suba anual, se agudizó tras las declaraciones del ministro de Economía, Amado Boudou, acerca de que el alza de precios afecta a los sectores más ricos.

A la línea oficial se sumó ayer el secretario de Política Económica, Roberto Feletti. Negó que haya una espiral inflacionaria, al tiempo que señaló que “todavía no está evaluada” la posibilidad de abrir la importación de productos para empujar los precios locales a la baja.

Randazzo fue el primer funcionario en admitir que “hay algunos aumentos que afectan los bolsillos de todos los trabajadores”. Dijo que “hay que tratar de solucionarlo, plantearnos por qué suben esos precios”.

Sin embargo, juzgó: “Hay una actitud, quiero decirlo con mucho respeto, de parte del empresariado que rápidamente apela al incremento de precios en vez de aumentar la oferta y los servicios”.

En declaraciones a las radios La Red y Continental, el funcionario destacó que el gobierno “no” es “el que tiene la máquina de remarcar”, y afirmó que “tenemos una emisión (de moneda) responsable que está vinculada al crecimiento del PBI”.

“Lo que hay que hacer frente a una economía que tiene una enorme demanda, producto también de una decisión política que es desarrollar un mercado interno muy fuerte, es aumentar la oferta de bienes y servicios y no aumentar los precios”, evaluó.

Dijo que “si la inflación sería la que muchas veces dan las consultoras privadas, no estaríamos frente a créditos que están entre el 15 y el 16 por ciento”.

“Si tenemos una inflación que supera el 25 por ciento y tenemos créditos con tasas del 15 por ciento, el negocio sería sacar créditos”, ironizó. (DyN)


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