El gobierno quiere evaluar a los docentes y el gremio se opone 

BUENOS AIRES (ABA) – El proyecto que anunció el vicepresidente “Chacho” Alvarez, para que los salarios de los docentes dependan de su capacidad y no de la antigüedad como hasta ahora, puso al titular de la cartera de Educación, Juan Llach, en el ojo de la tormenta.

El secretario adjunto de CTERA, Hugo Yasky, quien tuvo mucho protagonismo en la lucha gremial durante todo el proceso de la carpa docente, salió ayer a enfrentar el proyecto oficial con una posición muy dura y rechazó de plano la posibilidad de vincular los salarios con el rendimiento. Al término de la conferencia de prensa que brindó en conjunto con el gobernador de Neuquén Jorge Sobisch, Llach percibió el interés de los escasos periodistas apostados en el Palacio Pizurno, y con picardía abrió el fuego diciendo: ¿de qué me van a preguntar?, y se dispuso a despejar los interrogantes:

– ¿Los fondos del Incentivo Docente se van a asignar de acuerdo a la capacidad de los maestros?

– No, el Fondo ya está aprobado y se va a pagar cumpliendo con la ley dictada por el Congreso. No hay idea de vincular su ejecución a la evaluación de los docentes.

– ¿Cuando se le va a pagar a los maestros el aumento proveniente del Fondo?

– El lunes vamos a anunciar la fecha de pago.

– ¿Cómo fundamenta la medida de evaluar a los docentes?

– Desde el primer día dijimos que la calidad educativa es prioridad, y transmitimos la intención de calificar a todos los actores y niveles del sistema. La evaluación no es para perseguir a nadie, sino para satisfacer una demanda de la sociedad que quiere saber que calidad de educación recibe.

– ¿Cuándo comenzarán los exámenes?

– En febrero vamos a anunciar el calendario. Se va a incluir por primera vez la evaluación de docentes que será por muestreo (es decir de un porcentaje representativo del sector) y no por censo, porque al ser un test experimental resulta muy costoso. Después es posible que se avance a una calificación integral.

– Hay sectores gremiales de la educación que se sienten defraudados, porque el gobierno esperó que se levante la carpa docente y ahora se les dice que sus ingresos dependerán de una evaluación, ¿Ud. que les responde?

– Los empleadores de los docentes son los gobiernos provinciales, y son ellos los responsables de poner en marcha la medida. El cambio se hará por consenso en el Consejo Federal, o si cada provincia desea implantarlo. Nosotros exponemos nuestra postura que es apostar a una mayor calidad de los docentes.

– ¿Cómo trabajarán para llevar adelante la propuesta de fijar los ingresos de los docentes de acuerdo a sus rendimientos?

– Buscaremos acuerdos en el marco del Consejo Federal de Educación y con los ministros de Educación de las provincias.

– ¿Cómo cree que reaccionarán los docentes, más allá de los gremios?

– Insisto, los cambios hay que realizarlos por consenso. No queremos hacer nada contra los maestros, sino con los maestros. Queremos alentar a los buenos maestros, que son la mayoría, para que vean como atractiva su carrera, que su esfuerzo es reconocido por eso todo esto lo ubicamos dentro de una política de jerarquización docente.

– ¿Aplicando premios y castigos?

– Diría de incentivos… castigos sí en cuestiones tales como la “industria del ausentismo”. No es posible que haya excesos como en Tucumán donde la ausentismo supera el 20 %.

– ¿Quién se encargará de evaluar la capacidad de los docentes?

– La Agencia Nacional para la Calidad de la Educación que tendrá la representación de las provincias. Para que no sea sospechada de injerencia política, van a participar pedagogos y especialistas de primer nivel.

– ¿Por qué la Nación va a evaluar la calidad de los docentes del interior del país?

– De acuerdo a la ley federal de educación, la evaluación del nivel de calidad sigue en la órbita nacional.

– Pero ¿no hay realidades territoriales que requieren un tratamiento específico?

– Los stándares de evaluación tienen que tener caracteres nacionales, pero se tendrán en cuenta las situaciones regionales.

Claudio Rabinovitch