El «híper» debe hacerse cargo, opinaron

Categórico resultado de una encuesta efectuada por «Río Negro On Line». La inmensa mayoría de los lectores opinó que por el robo de un auto ocurrido el martes en la playa de un híper neuquino debe responder económicamente el propio supermercado.

A la pregunta ¿Quién cree Ud. que es el responsable de la seguridad de los vehículos estacionados en el predio del híper?, un 91,59 % respondió «el híper», sobre un total de 618 votos.

Por el contrario, solo el 8,41% expresó que debe hacerse cargo el propietario del vehículo.

Responsabilidad del híper

Al margen de las opiniones expresadas, numerosos fallos respaldan el criterio de que los dueños de un establecimiento comercial que ofrece estacionamiento gratuito a sus clientes están obligados a restituirles esos vehículos a sus dueños, por lo cual deben afrontar frente a ellos los costos en caso de robo o daños graves al vehículo.

El estacionamiento en un hipermercado es un tipo de contrato especial denominado depósito necesario, y por lo tanto los casos se resuelven en razón de la buena fe prevista en el artículo 1.198 del Código Civil y en la responsabilidad prevista en el 1.120 de esa norma. El comercio asume automáticamente la guarda del vehículo y, por lo tanto, adquiere un deber de custodia del rodado. Esto no requiere que se haga un pacto explícito ni se emita ningún vale ni ticket.

En los casos en que fallaron así, los jueces consideraron que el estacionamiento en un comercio, si bien gratuito, no es desinteresado por parte del propietario del hipermercado, ya que ofrecer ese servicio a sus clientes le permite atraerlos y asegurarse así mayores ventas. Esto no cambia para los casos en que el comercio previó un servicio de vigilancia o no lo hizo, ya que en este caso su negligencia no puede ser invocada para perjudicar al propietario del vehículo que lo perdió por robo.

No obstante, la responsabilidad del supermercado -según los jueces- se limita al valor del vehículo a la fecha del hecho dañoso, y no incluye el dinero o los efectos dejados dentro de él por el conductor.