El MPN tiene tres postulantes para Neuquén capital

NEUQUEN (AN).- En el Movimiento Popular Neuquino se tomaron muy a pecho lo señalado el gobernador y jefe del partido, Jorge Sobisch, en relación a que, en el momento de elegir candidato, serán consagrados los mejor posicionados. Y en tren de ocupar el mejor lugar para ese momento, ya son tres los que largaron la carrera que los conduzca a la intendencia de la ciudad. Herminio César Balda, Luis Julián Jalil -que quieren repetir-, y Federico Brollo trabajan en todos los frentes para reemplazar al radical Horacio Quiroga al frente del gobierno municipal.

Balda y Jalil ya conocen el despacho del segundo piso del edifico de avenida Argentina y Roca y Brollo dejó hace un par de años su banca en la Legislatura y la vicepresidencia primera de esa cámara para preparar su aterrizaje en la intendencia. Antecedentes que los habiliten para pretender el puesto no les faltan y cada uno se encarga enarbolarlos lo más alto posible.

«A mí esto de entrar en contacto con la gente me resulta muy fácil, porque está fresca aún mi anterior gestión. Pero no me quedo en los laureles, vengo haciendo encuentros con las vecinales, los sectores de la municipalidad y otras agrupaciones», dijo ayer Luis «Chito» Jalil, que en la anterior interna fue vencido por el «pollo» de Sobisch, el presidente del BPN, Luis Manganaro. Pero Manganaro no llegó al tercer piso del Palacio Municipal.

Balda, que actualmente se desempeña como presidente del ente provincial de termas, viene «pateando» los barrios desde hace más de un mes, distribuyendo volantes y colgando carteles con su nombre. Hasta en las ventajas de «Pechi» Quiroga colgó un pasacalles con su gran objetivo de volver a ponerse el traje de intendente.

«Vengo recibiendo el afecto y el impulso de todos los sectores del partido, que me alientan a que me postule. Yo voy a hacer lo que la gente, pero es algo prematuro hablar ahora de candidaturas. Por otra parte, pueden surgir incluso otros nombres», dijo ayer Brollo, admitiendo que al margen de la cautela de sus palabras, ya está en la grilla de largada.

Aún cuando fue el último de los tres que ha revelado sus ambiciones de ser intendente, fue el primero que se sindicó desde el MPN para recuperar el gobierno de la ciudad.

Cuando se le hizo notar que su precandidatura surgió desde el momento mismo que abandonó la Legislatura para dar batalla en el Deliberante, se limitó a decir que «de todos los sectores del partido me siento apoyado».

Brollo, que sale del riñón sobischista, al igual que Manganaro, dijo que fue «tentado» por sus partidarios a que sea el candidato a la intendencia y que la idea «no la desmiento», en la medida que viene acompañada del aliento incondicional «de la militancia».

Ayer, antes de emprender un viaje, admitió que es uno de los nombres «fijos» al cargo, pero le hizo un elegante gambeta a la pregunta de si sentía «el hombre elegido por el Gobernador»: «me apoyan los afiliados y diversos sectores del partido», dijo.

La imagen de Jalil ya aparece en volantes multicolor con su postulación y sus allegados trabajan a full, como si la interna estuviera a un paso. El actual diputado nacional apela a los mensajes ambiguos: «Todavía faltan muchos meses y ya sabemos que en Neuquén no se adelantarán las elecciones. Por otra parte, yo creo que siempre es importante poder consensuar las listas», dijo ayer.

Pero en la otra variante se despachó como si estuviera en un palco de campaña, en un discurso a sus seguidores: «yo inicié el tema de la obras para la terminal, los planes para el Paseo de la Costa, los trabajos de entubamiento de canales que atraviesan la ciudad…»

Salto impulsa una regionalización «sin vencedores ni vencidos»

CIPOLLETTI (AC).- «Es infinitamente más importante hablar de regionalización con todo lo que ello implica, antes que minimizar la propuesta enfocando solamente el tema en la unificación», consideró el líder del Movimiento Patagónico Popular (MPP), Julio Rodolfo Salto.

Ayer se reunió la conducción provincial del MPP, en la base de la calle Sáenz Peña, donde se debatió el tema de la regionalización.

En el documento que firmó Salto al concluir el encuentro, se consignó que ya en 1994 el MPP, en la plataforma electoral, «insertaba el concepto de región y planteaba una drástica reducción del número de senadores, asignando uno por región, a los efectos de que representen los intereses del país federal y no el encolumnamiento en bloques políticos de partidos nacionales que históricamente han respondido al centralismo».

«La idea de juntarnos para concretar políticas regionales es de un valor y una importancia tal, que merece extremar los cuidados para que cualquier propuesta de comenzar a transitar esos caminos se haga sobre la base de la sumatoria de voluntades, la multiplicación de acciones y no de prácticas que generen vencedores y vencidos. Una Patagonia unida que potencie su perfil productor y exportador está destinada al éxito», expresó Salto. Agregó que «cualquier momento es bueno y cualquier interlocutor es válido si de lo que se trata es de diseñar políticas comunes. El desafío es profundizar los lazos y desarrollar una acción sostenida y permanente en tal sentido».

El presidente del MPP consideró que el tratamiento en conjunto de los temas de salud, educación, seguridad y otros servicios que presta el Estado y la racionalización del gasto político constituyen sólo un aspecto de un proyecto que debe tener como objetivo primordial un desarrollo sostenido que genere riquezas, empleo y bienestar para las futuras generaciones.

«El tiempo perdido en defender políticas chicas, los cotos de caza y el de negociar por separado con nación debe ser recuperado, poniendo en práctica políticas con un fuerte desprendimiento y una actitud verdaderamente patriótica que encauce todos los esfuerzos hacia la misma dirección», dijo.

«No está en la simpleza de la unificación provincial -añadió- la solución a los problemas de los patagónicos sino en la inteligencia para encontrar el camino común donde todos ganen y nadie pierda, en una región que, de no ser por la torpeza y falta de visión estratégica del conjunto de la dirigencia, debería estar ya disfrutando de mejores condiciones de vida para el conjunto de sus habitantes».