El poderoso espíritu de Divididos

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Y el público local tuvo su revancha. Más de mil fueron los fervorosos seguidores de «Divididos» que participaron del potentísimo recital que «La aplanadora» brindó en el gimnasio del Colegio Don Bosco.

Ricardo Mollo, Diego Arnedo y Jorge Araujo demostraron esta vez por qué son considerados los «Maradona del rock and roll» como coreaba el millar de gargantas que no se permitió descanso durante la hora larga de contacto con el grupo. También hubo invitados de jerarquía. En un pasaje el baterista dejó el instrumento en manos de El Gonzo González cuya actuación fue festejada con algarabía. También pasaron por el escenario Tito Fargo y Daniel González, hermano del baterista de Pappo.

A pesar de la acústica del salón, que no es de las más aptas para semejante potencia del sonido, el grupo dejó en claro que «lo espiritual está». La inefable comunicación con el público quedó manifestada durante todo el recital que incluyó mayoritariamente temas de «Narigón del siglo» y «La era de la Boludez».

También hubo espacio para malabares con fuego a cargo del grupo local «Kasalamanka» que otorgó un colorido inesperado a la presentación. Cada interpretación fue acompañada con imágenes proyectadas en una pantalla gigante.

Con la versión de «El arriero va» del «músico o ángel nacido en Pergamino llamado Atahualpa Yupanqui», según definiera Mollo desde el escenario, quedó demostrado que efectivamente en música no existen fronteras tal como lo había expresado el guitarrista: «dividir la música en géneros es limitar algo. Es lo que te llena el oído y el corazón».

La actividad de Mollo en esta ciudad no quedó circunscripta al escenario. El miércoles subió a la cumbre del cerro Otto y descendió caminando, tal vez disfrutando de los muchos kilos menos que delata su figura. Conocedores de su trayectoria llegaron a relacionar este hecho con el cambio de tonalidad de algunos de los temas que cantó. También aprovechó para visitar a un colega, el luthier Raúl Pérez con quien comparte el dificil arte de fabricar instrumentos.

Divididos en Neuquén

Creciente expectativa y muy buen ritmo en la venta de las entradas, es según el testeo de los organizadores, lo que se está observando en Neuquén, respecto a la actuación esta noche, de «Divididos».

Como ya es habitual, para evitar aglomeraciones, las puertas de estadio Ruca Che se abrirán a las 20, mientras que el recital comenzará a las 21.30. Se ha destacado que instrumentarán un amplio sistema de seguridad, importante para que cubra no sólo las áreas de ingreso, sino la zona de estacionamiento.

Otro dato para que los espectadores tengan en cuenta: desde las 19.30 se trasladará la taquilla al Ruca Che, dejándose pues de vender desde ese momento en el centro.