El problema: la mala higiene bucal

por AGUSTIN BIASOTTI

«Nueve de cada diez casos de mal aliento tienen su origen en la boca, pues es allí donde viven los millones de bacterias que producen los llamados compuestos sulfatados volátiles, que son los que causan la halitosis, que es su nombre médico», asegura la doctora Melania González y Rivas, odontóloga máster en salud bucal comunitaria y coordinadora nacional del departamento de Educación para la Salud de la Confederación Odontológica de la República Argentina (CORA).

Sucede que, cuando se descomponen, las bacterias anaeróbicas conforman la placa dental, aquella que constituye el origen de las caries y de la llamada enfermedad periodontal, que es la que daña la salud de las encías. Pero además, producen en la parte de atrás de la lengua la formación de las sustancias culpables de la halitosis, una molestia para quien la padece y también para quienes lo rodean.

«El único tratamiento efectivo para el mal aliento es eliminar las bacterias bucales que lo ocasionan –asegura la doctora–. Para lograrlo, hay que tratar la enfermedad periodontal y las caries que pueda haber, y a partir de ahí instaurar una correcta higiene bucal diaria, a través del uso regular de cepillos, cremas o geles dentales, hilo dental y colutorios fluorados que permitan obtener una remoción eficaz de la placa bacteriana.»

Pero si el 90% de las causas del mal aliento se origina en la boca, ¿qué puede decirse del 10% restante? «Se debe a problemas sistémicos –respondió la odontóloga. Los más frecuentes son la diabetes mal controlada (que se caracteriza por la presencia de un aliento dulzón) o la insuficiencia renal crónica. En estos pacientes, el aliento tiene olor a amoníaco. También hay problemas gástricos y ciertos medicamentos pueden causar mal aliento.»

Justamente, el mal aliento de la mañana es sistémico, aunque no responde a ninguna enfermedad. «Sencillamente es el resultado de estar en ayunas. Al no haber alimentos en el estómago son los ácidos los que lo producen y es por eso que desaparece des

pués de desayunar y lavarse los dientes», explicó González y Rivas, de CORA.

Un nuevo aliado contra la halitosis

Odontólogos japoneses aseguran que comer 90 gr diarios de yogur sin azúcar es una saludable y efectiva forma de mantener a raya a las sustancias causantes del mal aliento, un problema que, se estima, afecta a una de cada cuatro personas adultas. Para llegar a esa conclusión, los investigadores de la Universidad Tsurumi en Yokohama, Japón, midieron los niveles de una de las sustancias que causan mal aliento (el ácido sulfhídrico) de voluntarios antes y después de comer yogur.

«Después de seis semanas, observamos una reducción del 80% en los niveles de ácido sulfhídrico», comunicaron los investigadores en la última sesión anual de la Asociación Internacional para la Investigación Dental, realizada en Baltimore, EE. UU., donde fueron presentados los resultados del estudio japonés.

«Los niveles de placa dental y de enfermedad de las encías fueron significativamente menores en el grupo de los voluntarios que comieron yogur que en el grupo de los que no comieron ese alimento. Estos resultados sugieren que comer yogur sin azúcar puede reducir los componentes del mal aliento, así como la presencia de bacterias dañinas» –refirieron los especialistas.

Durante su experimento, los odontólogos dieron a los voluntarios yogur natural, sin azúcar, que contenía bacterias lácticas: Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus.