El Registro Civil suma problemas

CIPOLLETTI (AC).- Para los 80.000 cipoleños se han instalado tres dependencias del Registro Civil, y todas tienen problemas.

El Registro Uno, ubicado en calle Fernández Oro, motivó hace poco una serie de notas de este diario y pese a la fugaz visita, en día y horario atípicos -un sábado a las 7 de la mañana- de la responsable provincial del área, Graciela Aún, junto con el encargado de la seguridad registral, el exjefe de policía Rogelio Lardapide, se hizo poco y nada.

Sólo se cambiaron algunos vidrios y tienen previsiones para arreglos diversos en fechas indefinidas, por lo que el personal sigue insistiendo en que se den soluciones de fondo.

El Registro Dos funciona en el hospital, en una muy pequeña oficina donde apenas caben los dos empleados, pese al gran movimiento que allí se genera por nacimientos, defunciones y otros trámites.

Y a estos dos se anexa la caótica problemática del Registro Tres, a cargo de Mónica Martínez, en el norte del ejido -en Cobián y Alberdi, de las 1.200 viviendas- porque las actividades se desarrollan en un casilla de madera que fue sede de la ex Casa Rionegrina, con algún revestimiento de ladrillo en lo que se usa como «sala de casamiento», que también se utiliza como oficina cuando no es día de matrimonios.

Para colmo, no hay baños, ni para las cuatro personas del Registro de la zona norte ni para los que concurren a hacer las variadas diligencias, por lo que debe apelarse a la buena voluntad de un vecino, que a veces opera como cuidador, para usar su sanitario.

También el vecino presta la cocina para calentar el agua para el mate o hacer un café reparador a media mañana. El Registro Civil Tres tiene una amplia jurisdicción que involucra a unas 30.000 personas, y por día concurren unas 70 por tramitaciones de la más variopinta índole.

Si algo faltaba para completar el escenario, llegó la basura que tiran los pobladores en un baldío inmediatamente aledaño a la casilla y que pone un toque de suciedad y contaminación al sector.