El Ruso se queda a pelearla en el Rojo

‘‘Llegué al club a los 14 años y sería difícil irme, hoy no lo pienso. Tengo la cabeza puesta acá’’, dijo ayer Diego Rodríguez.

El arquero de Independiente que terminó el torneo pasado como suplente de Martín Campaña manifestó una vez más su sentido de pertenencia con el club.

A pesar de haber sido parte del equipo que ascendió a primera luego de jugar el Nacional B, es uno de los más resistidos por la hinchada tras haber cometido un par de errores groseros con los que el puesto convive a diario.

En ese sentido, el Ruso expresó que ‘‘El hincha en general es impaciente, no pasa solo acá’’.

Además fue optimista de cara al futuro: ‘‘me gustaría volver a tener la oportunidad. Entreno día a día para demostrar que estoy para jugar. Después, el DT decide y yo espero mi posibilidad’’, finalizó Rodríguez.