El teatro del Histrión con obras y sala nueva

NEUQUEN (AN).-¿En qué anda Víctor Mayol y su Teatro del Histrión? He ahí la inquietud, porque le habíamos perdido el rastro hace un tiempo.

Golpeado en el medio del pecho, como todos los elencos que se quedaron sin salas, la encrucijada los movió a crear mecanismos de salida, tanto para ensayar, como para las futuras puestas.

Juntos e intercambiando sus cuestiones teatrales, estaban las dos cabezas responsables de la compañía.

Es tangible, la buena onda que va en ida y regreso entre Víctor -a la sazón director artístico- y Ricardo Bruce, director ejecutivo del elenco y asistente en algunas obras.

Con Mayol, siempre se retoma con fluidez el intercambio, así pasen los meses.

-¿Ya están con obras para estrenar en un futuro cercano?

-Víctor Mayol: Está previsto para mediados de septiembre, el estreno de la primera producción del año 2006.

Se trata de «Factum», dramaturgia propia, basada en «Guiones de Imágenes» de los actores participantes y textos de La Biblia.

-Pero viene con doble premio esta temporada ¿o no?

-El segundo espectáculo es una versión escénica que cuenta con mi dramaturgia y dirección, basada en Las Troyanas de Eurípides y en textos del Antiguo Testamento.

-Y el reconocimiento a una personalidad del teatro neuquino.

– Sí. Para encabezar el reparto fue invitada la actriz, pionera y máxima representante del teatro neuquino, Alicia Fernández

Rego, como corolario del Taller de Expresión Oral, en el que dirigió al grupo, durante el primer semestre del año.

-Hay una tarea esencial. La multiplicación de directores. ¿Ustedes también proveen formación? ¿Cómo va ese tema?

-Dentro del espacio dedicado al Area de Instrucción, se desarrolló el Primer Taller de Puesta en Escena, tendiente a la conformación de un cuadro de directores de escena, que puedan, oportunamente, integrarse a los proyectos del grupo.

-Esta experiencia ¿dio algún logro tangible?

-Como resultado del proceso se presentará proximamente la obra «Las Polacas» de Patricia Suárez, en versión escénica y dirección de Ricardo Bruce. Integran el elenco: Ana Alonso, Pablo Di Lorenzo, Silvina Forquera, Carina López y Patricia Videla Avila.

Una nueva sala teatral

-Sin techo y a la intemperie ¿Qué les está ocurriendo? ¿Cómo andan?

-Como siempre trabajando mucho y tratando de no caer en las garras de la mediocridad, que lamentablemente, parece ser el estado natural del teatro neuquino.

-Y carencias, salas cerradas, un sálvese como pueda, en medio de alquileres que trepan por las nubes y los negocios inmobiliarios que están a pedir de boca. ¿De qué manera salieron del atolladero?

-Aprovechamos que no teníamos un lugar para estrenar y nos dedicamos a encarar aspectos relacionados con la organización

interna del grupo: sacar la personería jurídica, página web, agenda internacional. Y en lo artístico también trabajamos «hacia adentro», con un Laboratorio en el que profundizamos metodología y entrenamiento.

-¿Qué los impulsó a buscar su propia casa?

-El cierre de la sala Conrado Villegas y la falta de espacios idóneos para realizar nuestros espectáculos, nos obligó a modificar las prioridades.

Luego de desarrollar nuestras actividades desde que nos conformamos, en el Centro Cultural La Conrado y continuando durante el presente año en el local multiusos cedido solidariamente por el Sindicato de Ceramistas, el grupo logró acceder a su propio lugar de trabajo, en el que desarrollará sus tareas de entrenamiento, formación y presentación de espectáculos.

-Es una noticia inmejorable. ¿Dónde está ubicado?

-En pleno centro de la actividad cultural neuquina, próximo al Museo Nacional de Bellas Artes, al Museo Emilio Saraco y al Parque Central, en la calle Chubut 240.

-¿Es un espacio que reúne las condiciones que exigen ustedes? -Comprende un espacio de 380 metros cuadrados, compuesto por una sala de espectáculos, hall de entrada, galería, depósito, baños y oficina. La inauguración está prevista para marzo de 2007, fecha en que se cumplirán cinco años de labor ininterrumpida de Teatro del Histrión.

-¿Cómo se sienten allí?

-Todavía no estamos usándolo porque hay que hacerle reformas. Y ahora viene la parte difícil, que es conseguir el dinero que hace falta para esa empresa. Estamos iniciando contactos para obtener auspicios, aporte, donaciones.

-Cuando esté inaugurado ¿piensan abrirlo como alternativa para el resto de los actores culturales de Neuquén?

-Por supuesto. Demás está decir que este espacio está abierto a los colegas teatristas y de las artes escénicas y artistas en general, que estén en condiciones de utilizarlo.