El triple trabajo del consenso

Cuatro meses del gobierno provincial en consonancia con el nacional labraron una marca de estilo que inevitablemente obliga a comparar con otros mecanismos de gestión donde sobresalía el caudillismo. Mañana se reunirá el órgano máximo del Movimiento Popular Neuquino, la Convención que preside Rolando Figueroa, en la que no habrá un tema convocante sino la intención de escuchar a sus integrantes para, justamente, evaluar la marcha del gobierno. El invitado estrella será el presidente de la Junta de Gobierno, Omar Gutiérrez.

La mirada externa arroja una fotografía con dinamismo del titular del Ejecutivo que no es similar a la del gobierno que muestra cierta quietud. La mirada interna, por lo que dicen sus protagonistas, es que “hubo aceptación de la nueva generación” y que “alejó los fantasmas de que iba a continuar el liderazgo de Jorge Sapag”. Éste no ha mostrado resultados de su cargo de coordinador interinstitucional, lo que le valió el mote de “ñoqui” por parte de Guillermo Pereyra.

También hay una lectura sobre la forma de comunicar la gestión, habida cuenta que Gutiérrez tomó la posta del protagonismo por la llegada que logró con el gobierno nacional en temas como Chihuido, coparticipación y ahora el viaje a Estados Unidos en busca de inversiones hidrocarburíferas. En el resto de las cuestiones más domésticas hay continuidad pero no cambios significantes.

El horizonte inmediato está dominado por la posibilidad de colocar los bonos Ticade, los títulos de cancelación de deuda por u$s 350 millones, que le dará un respiro a las cuentas provinciales que están en color amarillo por la inflación, la devaluación y las demandas gremiales. El gobierno nacional había fijado prioridades en las que estaba en un tercer lugar: primero iba a salir Buenos Aires, que consiguió financiamiento con una tasa superior al 9%; luego el bono para pagar a los holdouts de Nación, que a 30 años logró un interés que rondó el 7%, y, supuestamente, ahora tenía que salir Neuquén a buscar estirar los vencimientos a 12 años. La ley 2952 autoriza a una tasa superior en cinco puntos porcentuales más que los bonos soberanos, aunque la expectativa es que se logre un porcentaje similar a los 115 millones de dólares que tomó Sapag en diciembre en el Credit Suisse al 7,4%.

En lo inmediato, el Ejecutivo prepara un proyecto para reformar la ley electoral a fin de excluir las listas colectoras y espejo mientras cosecha rispideces de otros sectores políticos que se habían entusiasmado en hacer una cirugía más profunda.

En el Legislativo, se asume por lo bajo que hubo desprolijidad en la ley para mejorar el recupero financiero del sistema de salud porque agitó fantasmas que, en su momento, había enarbolado otro gobierno del mismo partido. Esta discusión, junto a la que planteó la capacitación obligatoria para los casi 9.000 subsidiados, abrió la puerta a una situación extraña para el conglomerado político de los 14 bloques legislativos. “La búsqueda de consenso nos lleva un triple trabajo porque, amén de lo que pueda ceder el oficialismo, también depende de la oposición que acepte el consenso. Antes la oposición sabía que aceptaba algún cambio, sino se aprobaba igual, y ahora encontró que la responsabilidad también es de ellos porque pueden tener mayoría”, razonó una fuente legislativa.

Luego del portazo que se le dio al polémico candidato a juez Ignacio Di Maggio, se va a resolver el gris en el que quedó el ahora magistrado de Río Negro Juan Pablo Chirinos, cuyo pliego viene de la gestión anterior de José Russo sin salir de la comisión. “Lo vamos a llevar al pleno”, dijo la fuente legislativa. El magistrado, más allá de sus antecedentes académicos, tiene una postura que no cae simpática en algunos diputados, como es haber sentado un precedente para que un reincidente pueda gozar la libertad condicional.

La dinámica política se va amoldando a la económica, con emergentes que reclaman atención, como el gremio docente que quedó insatisfecho en una asamblea donde la oposición a Marcelo Guagliardo todavía no termina de digerir los 35 votos que obtuvo para aprobar el último acuerdo salarial.

Opiniones

Mario Rojas

mariorojas@rionegro.com.ar