El turismo como objetivo

Las últimas bombas de ETA en Madrid siguen el mismo patrón que las que el grupo colocó en el último verano en varias localidades de la costa española y estarían destinadas a afectar al turismo, una de las principales fuentes de ingresos para la economía nacional.

Los ataques de ayer representan la cuarta serie de 21 atentados del grupo separatista vasco en este año, tras los cometidos en agosto contra intereses turísticos en el cantábrico, contra torres eléctricas en septiembre y contra agencias inmobiliarias en octubre. En esas acciones, el grupo también utilizó pequeños artefactos de fabricación artesanal compuestos por amonal, amosal o cloratita.

Con estos atentados, ETA cumplía con una tradición que se repite año tras año: su campaña de verano, con la que trata de perjudicar los intereses turísticos españoles .

En este caso, el propósito fue sembrar el caos en sitos clave de las rutas de la capital justo cuando millones de viajeros se aprestaban para un fin de semana largo.

Todo esto en una sociedad madrileña sensibilizada por el recuerdo de los sangrientos atentados del 11 de Marzo en Atocha.

El objetivo fue dejar claro que, pese a las detenciones, ETA sigue viva y dispuesta a atacar.

( «El País»/Redacción)

Nota asociada: Cinco bombas de ETA desatan el caos en Madrid  

Nota asociada: Cinco bombas de ETA desatan el caos en Madrid  


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios