Elecciones con el sello del MPN
El gobierno de Sapag convocaría a las generales para junio próximo. Coincide con los 50 años del partido provincial.
El gobierno de Jorge Sapag intentará encapsular el proceso electoral de la provincia del año próximo con la intención de que la puja por los cargos nacionales afecte lo menos posible el debate y los resultados locales. La idea sobre la que trabaja el oficialismo consiste en fijar las elecciones generales en junio y forzar el llamado a internas del Movimiento Popular Neuquino (MPN) para el verano. Dos fuentes oficiales dijeron que la fecha probable sería fines de enero o principios de febrero. Con el partido bajo su control, el ex gobernador Jorge Sobisch tiene la facultad de definir la fecha de las internas, pero la Carta Orgánica partidaria establece plazos que se deben cumplir una vez establecida la elección general. Es decir que cuando el Poder Ejecutivo fije la fecha de elecciones generales Sobisch tendrá un margen acotado para convocar a internas. El plan del gobierno para realizar las elecciones generales en junio no es casual. El 4 de ese mes se cumplirán 50 años de la creación del MPN y la apuesta consiste en aprovechar las bodas de oro para reactivar el potencial del único partido provincial de la Argentina que sobrevive en el ejercicio del poder. “Es una forma de recrear la mística del partido”, explicó una fuente del MPN. El gobernador Sapag no ha dado precisiones al respecto pero sí algunos indicios. Dijo en dos ocasiones diferentes –la última fue esta semana– que las elecciones se harán entre junio y agosto del año próximo. Sobre este proceso de definiciones, sectores del sobischismo hicieron circular la versión de que Sapag y Sobisch habrían estado negociando cuestiones referidas a la interna. En la semana que finalizó el gobernador desmintió ese rumor. Sin embargo hubo un dato que lo alimentó: fue la resolución que tuvo la interna de CALF, la cooperativa que distribuye la energía en la ciudad de Neuquén. Cuando todo parecía indicar que el actual presidente Marcos Silva, un dirigente referenciado en el sobischismo, iba a enfrentarse en una elección con una lista que incluía a Facundo Gaitán, un hombre de creciente confianza en el gobierno de Sapag, hubo un cambio repentino y la lucha desapareció porque el contendiente se retiró de la compulsa. Ahora Silva seguirá manejando CALF. Desde el gobierno se dio una explicación para desalentar especulaciones sobre un supuesto acuerdo con Sobisch alrededor de la interna de la cooperativa. Se dijo que Gaitán, actual subsecretario de Gobierno, será designado en un puesto clave de Desarrollo Social. El funcionario desembarca en ese ministerio para el armado político de la asistencia social en un año electoral. Su llegada a esa cartera es, además, una señal hacia el ministro del área, Alfredo Rodríguez. En la semana circuló la versión de que Rodríguez habría presentado la renuncia al cargo. Sapag, ante una consulta sobre posibles cambios en el gabinete, respondió que todos los ministros siguen firmes en sus puestos. Sectores de la oposición creen que Sapag está preparando un colchón de recursos para encarar el año electoral con maniobras financieras que le permitirán manejar no menos de 700 millones de pesos adicionales. La ministra de Hacienda, Esther Ruiz, divulgó el primer número oficial aproximado de lo que será el presupuesto del 2011. Habló de 7.200 millones de pesos, una cifra similar a la de este año pero que no contiene recursos extraordinarios por prórrogas de concesiones petroleras, aunque compensa esa pérdida con incrementos en ingresos corrientes. En la oposición calculan que habrá una subvaluación de los recursos que podría ser del orden de los 400 millones de pesos, tal como estiman sucederá, en la misma cifra, al cierre del actual ejercicio presupuestario. Aquí computan diferencias en el cálculo de regalías, coparticipación federal e impuestos provinciales, entre otros conceptos. El gobierno además presentó proyectos en la Legislatura que le permitirán manejar más recursos. Por un lado quiere tener una autorización cerrada con el presupuesto para endeudarse por 400 millones de pesos y por el otro recuperar los pagos que ya hizo de la deuda con fondos del tesoro. En este último caso echará mano a parte del dinero que ingresará luego de la colocación de los bonos emitidos por 200 millones de dólares. Se calcula que la cifra que el gobierno pretende recuperar es de 140 millones de pesos en concepto de deuda que se pagó este año a Nación y 52 millones de dólares de vencimientos de bonos que se emitieron en la gestión de Sobisch. “Si además Sapag acuerda con el gobierno central el plan de refinanciamiento habrá que sumarle a esta bolsa otros 240 millones de pesos”, dijo una fuente legislativa de la oposición. Con todos estos números –diferencia por menor cálculo de ingresos corrientes, recuperación de pagos a través de los bonos, posibilidad de endeudarse con bancos y posible refinanciación de deudas– la cifra del colchón puede ser de no menos de 700 millones, resumió la fuente. Al 2011 hay que sumarle la presión que ejercerán los gremios por los sueldos, una pelea que será especial en un año de renovación de autoridades. De las palabras de la ministra Ruiz pronunciadas esta semana se desprende que la pauta de incrementos contemplada para el 2011 será similar a la de este año, aunque en el gobierno saben que las negociaciones venideras serán más duras, de contenido menos gremial y más político.
gerardo bilardo gbilardo@rionegro.com.ar
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