En busca del 'Cipo' perdido

CIPOLLETTI (AC).- Muchos son los nubarrones que envuelven el panorama de Cipolletti en el arranque de este Clausura. Un punto en dos presentaciones, desatenciones defensivas, intermitencias en la generación de juego y poca suerte. Así fue el comienzo del albinegro en la versión 2004 del Argentino A.

Cipolletti venía se perder una final con Racing de Córdoba y muchos eran los interrogantes que se abrían de cara al futuro. Los alejamientos de Rómulo Severini, Pablo Piro y Javier Muñoz despertaron preocupación, aunque la repatriada de Lorenzo Frutos produjo cierto respiro.

El primer partido dejó un sabor agridulce. El albinegro arrancó con todo, generó varias situaciones y la sociedad Frutos-«Toto» Méndez entusiasmó. Pero Sergio Ciattaglia cometió un error garrafal, Lorenzo se fue a las duchas muy temprano y el invicto corrió peligro.

En tierra cuyana todo fue muy distinto. El albinegro salió perdiendo casi desde el vestuario -gol a los 4 tras otra falla del «Gringo»- y la estantería se desmoronó: Cipolletti nunca encontró el balón, los errores defensivos se sucedieron y la cosa pudo haber terminado aún peor.

Muchos se preguntan si este Cipolletti es el equipo sólido d otros torneos. Hasta el momento no lo ha demostrado, porque Ciattaglia no pasa un buen momento, Palomeque y Bissio no exhiben la solvencia de siempre, y sólo Cristian Martínez salva la ropa. En la mitad las cosas no andan mucho mejor, tanto a la hora de defender como de atacar. Sólo algunos buenos momentos contra Universitario: muy poco para un elenco favorito.

Por lo visto hasta ahora, la mejor aparición fue la de Méndez, un chiquitín rápido y hábil de mente y físico. Porque aunque facturó el domingo, Germán Alecha no es ni la sombra de aquel pibe que surgió como una de las máximas atracciones del torneo.

También es cierto que los jugadores son casi los mismos del certamen pasado, y que sólo falta acomodar algunas piezas para que «las cosas vuelvan a la normalidad», según afirmó el técnico en diálogo con «Río Negro». Dijo además que en Mendoza «se jugó mal en líneas generales», y que la culpa «es de todos, porque cuando se marca mal, se marca mal en todas las líneas».

Martínez fue tan claro como el DT. Para el líbero se debe mejorar en la concentración y el orden. «Lo que pasa es que nos hacen un gol y perdemos la calma. No podemos desesperarnos; vamos a salir a flote».

No fue bueno el arranque, aunque este equipo ha mostrado el temperamento y el espíritu necesario para sobreponerse a tiempo. El crédito sigue abierto.

Si no ganan de locales…

«Mingo» Perilli reconoce que el equipo no pasa por un buen momento. Y aunque dice creer que sus dirigidos saldrán de este mal trance, reconoció que «será difícil clasificar» para la próxima ronda en caso de perder alguno de los dos partidos que vienen de local -con Luján de Cuyo y Brown de Madryn-.

Ayer por la tarde el técnico salió a ponerle el pecho a las balas y le quitó presión a sus jugadores. «Me hago cargo del momento que atravesamos», disparó. Preocupados pero calmos, Perilli y Cristian Martínez recordaron que este plantel «pasó por momentos peores y siempre salió adelante». También saben que los dos cotejos que vienen serán la bisagra, el punto de inflexión en el camino a la clasificación. «Debemos ganar o ganar», concordaron.

Frontal como siempre, el DT indicó que Cipolletti deberá demostrar por qué llegó a la final. «Si en este torneo sacamos diez puntos o menos querrá decir que llegamos de casualidad», afirmó, pero después derrochó confianza y aclaró «estoy seguro que vamos a sacar los mismos puntos». (AC)