En la banda habría un médico

Tras la detención de siete personas vinculadas con el secuestro del joven Pablo Belluscio, los investigadores convencidos de que al menos uno de los arrestados o prófugos tenía conocimientos médicos por la prolijidad con la que le cortaron parte del dedo a la víctima, en una macabra prueba de vida para su familia.

Según se indicó, al chico le dijeron que lo iban a cambiar de lugar de cautiverio y que, para eso, necesitaban «doparlo»; fue entonces cuando lo anestesiaron y le cortaron parte de su dedo con «precisión» médica, según fuentes del caso. Se cree, además, que la misma banda estaría relacionada con otros importantes secuestros que se cometieron en los últimos tiempos.

Los investigadores tienen datos para avanzar con la pesquisa, pero hasta ahora no saben dónd quedaba «el pésimo lugar» en el que estuvo recluido el chico durante los 43 días en los que permaneció «vendado y atado». Se espera ahora que la víctima supere el shock post traumático que sufrió para ser interrogado.

«El tiene que hacer su catarsis y cuando esté en condiciones vamos a escucharlo», señaló a la prensa la fiscal del caso Rita Molina, quien aún no interrogó tampoco a los detenidos porque -explicó- «en estos procedimientos hay que ser muy prolijos para evitar las nulidades».

La Policía, como suele hacer en estos casos, esperaron a que el chico fuera liberado y después salieron a detener. Pero tanto el comisario Angel Casafuz como la fiscal Molina, aseguraron que ya tenían «perfectamente identificados» y «desde hacía mucho» a varios de los sospechosos en este secuestro. «Esperamos el pago del rescate para luego ir tras la banda», dijo Molina, quien subrayó que la gavilla está «semidesbaratada».

Casafuz opinó que la carta que hizo pública la familia Belluscio fue un «grave error». El comisario sostuvo que los elementos que se le incautaron a los siete detenidos por el secuestro demuestran fehacientemente su participación en el hecho. «Son delincuentes civiles, cinco hombres y dos mujeres», cada uno de ellos con tareas muy específicas asignadas al secuestro. Según trascendió anoche, las mujeres eran las encargadas de cocinarle a Belluscio e incluso se habrían encariñado con el joven al punto de prepararle las comidas que este les pedía.

Casafuz confirmó que en los allanamientos se incautaron armas, automóviles y «distintos elementos que prueban fehacientemente la participación» de ellos en el hecho. No obstante, se sabe que los arrestos de los siete detenidos -cinco hombres y dos mujeres- se concretaron tras una cadena de allanamientos en distintas casas particulares en las villas de emergencia La Cava y San Carlos, de San Isidro, y también se hicieron operativos en Don Torcuato, el Talar de Pacheco, de Tigre y en Benavídez. Anoche seguían los procedimientos buscando a los supuestos cabecillas de la banda, que serían los tendrían los 100.000 pesos que se pagaron de rescate.

La amputación de parte del dedo «no fue un acto compulsivo», señalaron las fuentes. Fue un «corte quirúrgico» que habría sido hecho con un bisturí, añadieron. Y es curioso que lo cuidaron perfectamente bien con la higiene y los antibióticos necesarios, cumplieron incluso el ciclo de horarios exactos para la medicación», señaló a la prensa.

Nota asociada: Tras 43 días de dramático secuestro, liberaron a Pablo Belluscio  

Nota asociada: Tras 43 días de dramático secuestro, liberaron a Pablo Belluscio