Encapuchados y armados robaron ferretería de Neuquén
Golpearon a un adolescente que había quedado paralizado de miedo
NEUQUÉN (AN).- Dos sujetos armados ingresaron a una ferretería de esta capital y tras reducir a un joven cliente y al propietario del local se llevaron 3.700 pesos de la recaudación y un celular. Los delincuentes huyeron en Ford Fiesta Max que manejaba un tercero, que hizo las veces de «campana». La policía cree que al comerciante «lo tenían estudiado».
«Todo habrá durado no más de dos minutos», señaló Dino, propietario de la ferretería que se ubica en calle Facundo Quiroga entre Roca y Belgrano.
El robo ocurrió alrededor de las 11.40 de ayer y por los datos aportados, los pesquisas de la Comisaría Tercera estiman que los delincuentes le habrían hecho un seguimiento y «tenían todo calculado».
La banda estacionó frente al local y mientras uno se quedaba a bordo del vehículo los otros dos bajaron e ingresaron al comercio. Apenas traspusieron la puerta se encapucharon y sacaron a relucir sus armas. Apuntando al dueño y a un cliente exigieron la recaudación del local.
«Parecían muchachos ´bien´ porque estaban bien vestidos. Lo único que hicieron fue amedrentar a un chico de 15 años que había venido a comprar. El chico se puso tan nervioso que no se podía tirar al piso, que fue lo que le pidieron los delincuentes, así que le pegaron un par de golpes para ponerlo boca abajo», relató el titular de la ferretería.
Sin oponer resistencia, Dino entregó a los sujetos los 3.700 pesos que tenía en la caja registradora, donde guardaba la recaudación de la tarde del viernes y lo que se había sumado durante la mañana de ayer. Además robaron el celular del comerciante, que era un Nokia 1.100.
Al momento de la huida los jóvenes «salieron corriendo y cuando se iban a subir al auto los observé como dubitativos, como que se recriminaban algo entre ellos, pero se subieron y se fueron», resumió el propietario asaltado.
Tras la fuga el hombre alertó al comando radioeléctrico y asistió al chico, que estaba shockeado por la experiencia vivida. A los pocos minutos el personal de la Comisaría Tercera arribó al local. Se montó un operativo de rastrillaje en las inmediaciones, que no tuvo éxito porque el auto permitió a los ladrones abandonar fácilmente la zona.
La causa quedó caratulada como «robo calificado por el uso del arma» en el Juzgado de Instrucción de turno. Al cierre de esta edición la policía continuaba la búsqueda de los autores.
Comentarios