Tarifa de luz: el congelamiento se reflejó en las facturas de septiembre 

El congelamiento de la tarifa de luz que aplicó el Gobierno tras el resultado de las elecciones primarias de agosto se reflejó en las facturas de septiembre: lo que pagó la demanda permitió cubrir menos del 52% de los costos de generación y fue menor al registro de mayo. Tal como se lo esperaba, los precios a nivel nacional se volverán a ajustar después del balotaje. 

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El proceso de segmentación tarifaria con el que este año se achicó la brecha entre lo que paga la demanda y los costos de generación de energía eléctrica se vio interrumpido por el calendario electoral. Durante los primeros 5 meses del año la diferencia entre un indicador y el otro se acortó en 16 puntos porcentuales y en mayo se alcanzó el indicador más alto del año (55%). 

Los datos son oficiales y se desprenden del último informe de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa). Los registros correspondientes a octubre se conocerán recién durante la segunda quincena de noviembre. 

El documento de Cammesa da cuenta de que la brecha volvió a estirarse en septiembre, por el freno al aumento previsto para usuarios residenciales, que luego se transformó en congelamiento hasta -por ahora- noviembre. 

Vale señalar los usuarios de ingresos altos o que no solicitaron los subsidios energéticos, recibieron en el noveno mes del año un salto cercano al 11% en los precios. Además algunas provincias realizaron ajustes de variables correspondientes a su jurisdicción que también incidieron en los precios de ese mes.  

Durante agosto lo que pagó la demanda alcanzó a cubrir casi el 53,7% de los costos de generación, y pese a que fue un desempeño mejor que en junio (41,57%) y julio (44,25%), fue más bajo que mayo. Y tal como se lo anticipó, la devaluación y congelamiento achicó nuevamente la brecha.  

Tarifa de luz: los costos de generación y las facturas  

Según el último informe de Cammesa, el costo promedio de la generación eléctrica (precio monómico) aumentó un 4,6% respecto a agosto. En términos interanuales, refleja un salto superior al 85%, lo que marca el sendero que se atravesó con la segmentación. Comparado con el mismo mes de 2021 el salto es superior al 190%.  

En paralelo, lo que paga la demanda (estacional) se incrementó otro 4,8% en comparación a lo que se vio en agosto y otro casi 80% respecto a septiembre de 2022.  

Tal como se indicó en este artículo, el aumento registrado en septiembre se explica por los ajustes que se realizaron a los usuarios de ingreso altos y algunas jurisdicciones. Pese a los esfuerzos por achicar la diferencia, el marcado atraso que hay entre un indicador y otro, sumado a la coyuntura y el calendario electoral, hacen que la tarea sea aún más difícil.  

Pasado a pesos, el informe de Cammesa refleja que en septiembre el costo monómico alcanzó los $22.767 por MWh, y el precio estacional fue de $11.817 por MWh. Se trata de una diferencia de unos $10.950 y, como se marcó más arriba, permitió cubrir casi el 51,9% de los costos de generación.