Escuela recibió la cocina esperada, pero no servía

El artefacto que envió el CPE a la Escuela Especial 1 de Roca, no cumplía las normas y Camuzzi se negó a instalarlo. ROCA (AR) .- La educación pública en Río Negro presenta diferentes aristas, muchas de las cuales llegan por momentos a rozar el absurdo. Algunos de los problemas que registran las escuelas provinciales tienen que ver con la falta de elementos: insumos de limpieza, material didáctico o alimentos para los comedores. Pero en otros casos, el problema se da cuando los elementos están, pero no son los que hacen falta.

Así ocurrió días atrás en la Escuela Especial 1 de Roca, que recibió del Consejo Provincial de Educación una cocina industrial pero la empresa Camuzzi se negó a instalarla porque no respeta las reglamentaciones vigentes.

Como si fuera poco, la Especial decidió suspender las clases esta semana, debido a que se están realizando múltiples reparaciones en la instalación de gas, por lo que solamente funcionará el comedor.

El Consejo de Educación envió hace diez días una cocina industrial a la Escuela Especial de Roca, que desde hace bastante tiempo registra inconvenientes con el gas en su edificio del barrio Norte. Sin embargo, cuando el personal de Camuzzi Gas del Sur concurrió al establecimiento para efectuar la conexión, observó que la cocina no contaba con el número de matrícula ni con la termocupla exigida para la habilitación. Como lo determina su política, la empresa se excusó de instalar el artefacto hasta que se cumpla con las exigencias requeridas.

«Planteamos el problema a la Delegación local del CPE, diciéndoles que compren cosas reglamentarias, porque los arreglos para instalar la cocina hay que pagárselos al matriculado que haga la conexión», señaló la directora de la escuela, María Inés Coronel. Por el momento no obtuvieron respuestas.

Al mismo tiempo que la Especial 1 recibió la suya, Educación habría mandado cocinas a otros colegios roquenses, aunque se desconoce la suerte que pudieron correr dichos artefactos.

Varios docentes se preguntaron ayer cómo es posible que el Estado adquiera algo -para lo cual previamente tiene que haber existido un presupuesto oficial para el concurso de precios o licitación- y no se verifiquen cuáles son las exigencias mínimas que deben cumplir esos elementos.

El establecimiento de la calle Santa Cruz recibe diariamente a 150 chicos con capacidades diferentes, divididos en dos turnos, que reciben el almuerzo y realizan múltiples actividades. La mayoría de los alumnos pertenece a familias muy carenciadas.

El problema con la instalación de gas se remonta a algunos meses atrás. De hecho, hace poco más de un mes se registró una explosión que derivó en un pequeño incendio, cuando una docente intentó prender una cocina ubicada en el sector donde funcionan los talleres. Como consecuencia de las pérdidas de gas detectadas, trabajadores municipales iniciaron esta semana la reparación de varias cañerías, lo que sumado a la falta de agua registrada ayer, motivó la suspensión de las clases por parte de los directivos.

Docentes del establecimiento estimaron que la suspensión se extenderá hasta el fin de semana, pero aseguraron que el comedor seguirá funcionando, ya que el personal que lleva adelante las reparaciones les instaló un tubo de gas en forma provisoria. En los últimos días, el comedor pudo seguir ofreciendo el almuerzo a los chicos gracias a la solidaridad de la escuela 238, vecina de la Especial, donde se pudieron cocinar los alimentos.