España: más desempleo y dura reforma laboral

El gobierno defendió ayer los cambios en el mercado de trabajo, esperando que frene la ola de despidos que ha dejado el 20% de la población sin empleo. El FMI pide más tijera fiscal.

AP

MADRID (Télam/AFP).- No cesan los tragos amargos para los españoles. El presidente socialista del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ratificó ayer importantes cambios en la política de empleo, con una dura flexibilización laboral, para combatir una desocupación que ya afecta a más del 20 % de la población. Y anticipó un panorama todavía más difícil en los próximos meses. Para colmo, ayer el FMI emitió ayer un comunicado en donde exigió a España mayor severidad fiscal aún en un presupuesto para el 2011 que ya se prevé como el más “restrictivo y austero” de los últimos años.

El desempleo siguió subiendo en España en el segundo trimestre del año situándose en el 20,09% de la población activa a fines de junio, frente a 20,05% tres meses antes. Al final del segundo del segundo trimestre del año, en España había un total de 4.645.500 parados, 32.800 más que en el trimestre anterior y 508.000 más que un año antes, según la Encuesta de Población Activa (EPA), que publicó el Instituto Nacional de Estadística (INE).

No ha dejado de crecer desde el tercer trimestre de 2007, cuando alcanzó un suelo del 7,95%, impulsado después por la recesión en que entró España a finales de 2008, golpeada por la crisis financiera y el estallido de la burbuja inmobiliaria, de la que está saliendo tímidamente.

El nuevo dato del paro llega al día siguiente de que el Congreso de los Diputados español aprobara la reforma del mercado de trabajo, que busca una mayor flexibilización del mercado de trabajo y fomentar el empleo, con la oposición de los sindicatos que la ven como un instrumento para abaratar el despido.

“Tenemos una tasa de paro inasumiblemente alta (…) La reforma laboral tiene como finalidad evitar despidos. Ante todo da flexibilidad a las empresas para que ante situaciones adversas puedan tomar otras medidas antes de llegar al despido”, argumentó Zapatero en conferencia de prensa al hacer un balance de la primera mitad del año. El Congreso de Diputados aprobara una enmienda sobre causas de despido objetivo con 20 días de indemnización, entre las que se incluye la sola previsión de pérdidas o reducción persistente de ingresos al empelador.

La reforma laboral socialista, que los sindicatos mayoritarios califican como la “más regresiva de la democracia”, fue rechazada con una convocatoria de huelga general para el 29 de septiembre.

Ante este panorama, Zapatero remarcó que defenderá la medida “donde haga falta”. “Estamos en un momento crucial, determinante para renovar la economía y el modelo de crecimiento. Estamos llevando a cabo el proceso más ambicioso de reformas que se recuerde en la historia de España”, subrayó Zapatero.

Zapatero reconoció que fue su etapa más dificil en el gobierno, mientras enfrenta presiones contrapuestas sobre el recorte fiscal.


AP

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