Están presos los padres del nene que perdió sus pies

Ayer detuvieron a Carlos Paredes por tentativa de homicidio. La madre está en la unidad 16 y le practicarán pericias psicológicas. Confirmaron que el chico dormía afuera desde hace dos meses atrás.

ZAPALA (AZ).- El padrastro del pequeño de 2 años que sufrió la amputación de sus dos pies por congelamiento fue detenido ayer en la capital neuquina acusado de homicidio en grado de tentativa. Carlos Paredes, quien fue arrestado alrededor de las 14 de ayer, será indagado mañana por el juez de instrucción Hugo Saccoccia a requisitoria del fiscal adjunto José María Díaz Villar.

En tanto, la madre del chico, Dominga Soto, permanece alojada en la Unidad 16 de Neuquén con una acusación de abandono de personas agravado por el vínculo. Su situación procesal sería resuelta por el magistrado en los próximos días.

Para la justicia, Carlos Paredes pretendía matar al pequeño por lo cual lo dejaba fuera de la casa en pleno invierno. Durante la requisa que los efectivos policiales realizaron a la vivienda que Paredes ocupaba con su concubina Soto en Moquehue descubrieron que ninguna de las prendas de la criatura se encontraban dentro de la casa.

Los investigadores creen que Paredes quería eliminar al chico porque interfería en su relación con Soto. Sólo así se explica la conducta inhumana de abandonarlo en la nieve y azotarlo con una varilla hasta dejarle marcas en la espalda que luego fueron corroboradas por los peritos.

Paredes, quien por una acción civil no pudo acercarse al chico desde que fue derivado a Neuquén, quedó alojado en una celda de la comisaría 12 y el lunes será trasladado hasta esta ciudad para prestar declaración indagatoria frente al juez Saccoccia.

Soto, por su parte, sigue detenida en la Unidad 16 porque los cargos que pesan contra ella por abandono de persona no son delitos excarcelables ya que establecen una condena mínima de 4 años de cárcel. Esta mujer se negó a declarar hace algunos días y según trascendió será sometida a pericias psicológicas para determinar si padece algún tipo de retraso mental que le impida comprender la brutalidad del episodio.

El hecho que conmocionó a la opinión pública regional se produjo en el paraje Moquehue donde el grupo familiar compartía una vivienda. La pesadilla que estaba viviendo el chico ante la incomprensible pasividad de su madre quedó al desnudo cuando profesiones médicos lo atendieron por las heridas que presentaba en la espalda.

Allí también se descubrieron las quemaduras por congelamiento que tenía en sus pies. Trasladado de urgencia al hospital Castro Rendón sufrió la amputación de uno de sus miembros casi en forma inmediata. A los pocos días tuvieron que volver a operarlo por la gravedad de la infección que le produjo la gangrena. Pericias posteriores demostraron que el cruel castigo que estaba recibiendo el pequeño venía de larga data. Según confiaron investigadores de la causa, hacía por los menos dos meses que dormía fuera de la casa.

En la actualidad el chico sigue internado al cuidado de sus tías que ya habrían anticipado su interés por adoptarlo.


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