Estudiantes marcharon en Fernández Oro

FERNANDEZ ORO.- Familiares y amigos de la joven desaparecida hace seis meses, acompañados por estudiantes secundarios, universitarios y vecinos pidieron respuestas ante la incertidubre generada tras el hallazgo del cuerpo de una joven, en la vecina ciudad de Cipolletti. Con una marcha que recorrió las calles de la localidad exigieron que se aclare la situación que mantiene en vilo a toda la región.

Alumnos de escuelas secundarias de Cipolletti y Fernández Oro se reunieron luego de las 19:30 en la plaza central de la localidad. A la convocatoria se sumaron estudiantes de la Universidad Nacional del Comahue.  

Luego de la movilización se realizó un acto en el que familiares de Otoño deslizaron criticas contra el accionar policial en la investigación llevada adelante para dar con el paradero de la joven.

Por otra parte, esta mañana alumnos de quinto año del CEM 14 decidieron ir hasta la plazoleta este -ahora lleva el nombre de Otoño- donde comenzaron a quemar cubiertas en señal de protesta y enojo.

Otros fueron a convencerlos de que esa no era la manera y que tenían que esperar todos juntos. Finalmente lo lograron y decidieron comenzar una vigilia.

Mientras, en Cipolletti, la céntrica plaza San Martín y el edificio judicial de los tribunales penales, cámaras, defensorías y fiscalías de calle España y Urquiza fue el epicentro de la bronca de estudiantes, en especial del CEM 5 -Alicia Moreau de Justo-, acompañados por dirigentes de la Corriente de Militrantes por los Derechos Humanos.

En la plaza la concentración se inició a las 9.30 y hacia las 11 una columna de casi 70 estudiantes y otros jóvenes, algunos de grupos de izquierda, se dirigió al edificio de Justicia, distante no más de cinco cuadras, entonando consignas en contra de los magistrados actuantes en el caso Otoño y pidiendo justicia como asismismo castigo a los responsables de la «inacción», involucrando a la policía y al gobierno.

En Tribunales hubo momentos de tensión, porque los jóvenes presionaban hacia adentro. Las puertas fueron cerradas entonces en todas las entradas, tanto en calles España como Urquiza, porque la gente quería ingresar supuestamente para abordar a la jueza natural de la causa, pero la movida resultó frustrada. En el interior del complejo había más policías que la guardia normal y habitual.

Fuente: (AC).