Exoneraron al comisario retirado Julio Arriola

VIEDMA (AV/AR).- El comisario retirado Julio Arriola, quien estuvo involucrado en la prescripta causa del doble crimen de Río Colorado, fue exonerado de la Policía.

Así lo dispuso el ministro de Gobierno de Río Negro a través del decreto correspondiente que ahora se encuentra a la firma del gobernador Miguel Saiz.

Este determinación fue planteada por el jefe de la Policía, Rogelio Lardapide, al quedar firme la sentencia contra Arriola, quien se desempeñaba como jefe del Gabinete de Criminalística de Roca, cuando Raquel Lagunas y Sergio Sorbellini fueron asesinados en Río Colorado.

Arriola fue el que informó que los primeros proyectiles que se extrajeron de los cuerpos de las víctimas pertenecían a un rifle Diana Nº14.109, arma que finalmente se corroboró no fue utilizada para ultimar a los jóvenes pero que sirvió para involucrar a las primeros condenados que finalmente fueron desvinculados totalmente de este aberrante hecho.

A la conclusión que el rifle en cuestión no fue utilizado para asesinar a los jóvenes riocolora

denses, se llegó tras una pericia que realizaron los especialistas de la Policía Federal en el año '97.

Además, una comparación realizada entre los proyectiles que fueron extraídos de los cadáveres de las víctimas, y los que se dispararon con el rifle marca Diana, determinaron que no tenían relación entre un proyectil y otro.

Ninguna semejanza

«El ancho de las estrías y las 'mesetas' de las balas no guardan ninguna semejanza, como puede apreciarse a simple vista de la foto de ambos proyectiles», se mencionó en su momento.

La conclusión de Arriola, que indicaban que las víctimas habían sido ultimadas con el rifle en cuestión, fue uno de los pi

lares de la acusación a prisión perpetua contra Mario González, quien posteriormente quedó en libertad al comprobante los errores periciales.

Además de la pericia realizada por la Policía Federal, y que desvirtuaba la teoría de Arriola, también se realizaron cotejos y análisis de proyectiles en la Policía de Neuquén y en Gendarmería Nacional.

En estos casos también se llegó a la misma conclusión: los proyectiles extraídos de los cuerpos de Sergio y Raquel no pertenecían al rifle de Mario González.

Arriola también había certificado que una Citroneta que se encontraba en el patio de la comisaría 11 de Río Colorado, no se encontraba en funcionamiento.

Ese vehículo había sido mencionado por algunos testigos, quienes aseguraron que lo vieron circular en cercanías del lugar donde fueron encontrados los cuerpos sin vida de Sergio y de Raquel. A pesar de los dichos de Arriola sobre un supuesto desperfecto de la Citroneta, el juez, con la ayuda de un mecánico, la puso en funcionamiento en pocos minutos.