Extienden un año el plazo para explorar áreas marginales
Varias empresas titulares de permisos de exploración de áreas hidrocarburíferas de la provincia de Río Negro y adjudicatarias por concursos públicos nacionales e internacionales, solicitaron al gobierno provincial la extensión de plazos para ejecutar trabajos de exploración comprometidos oportunamente, al tener en cuenta distintas situaciones económico-financieras desfavorables, especialmente los efectos de la crisis internacional del año pasado. Si bien los requerimientos fueron expuestos al menos por tres empresas petroleras hace un tiempo, recién el 2 de marzo pasado –con vigencia a partir de la semana pasada- el gobierno rionegrino autorizó la suspensión por un año del plazo de cumplimiento de las obligaciones derivadas de los concursos. La medida se instrumentó a través del decreto 90, firmado por el gobernador Miguel Saiz y por el ministro de Producción, Juan Accatino, y difundido en el Boletín Oficial. Entre otras extensas consideraciones, el instrumento oficial puntualiza que luego de la evaluación de los fundamentos que motivan las solicitudes de los titulares de los permisos de exploración, se ha podido establecer que “las causas no se circunscriben a casos y circunstancias propias de las áreas involucradas, sino a la concurrencia de una serie de factores de carácter general que han alterado profundamente las relaciones económico-financieras de dichas empresas y que tienen el común denominador de ser ajenas a las mismas”, según difundió la agencia ADN. Cumplimiento de inversiones El período de prórroga es de un año calendario por período y para acceder a ese criterio las empresas permisionarias –al finalizar el plazo de exploración- deberán haber cumplido con la totalidad de las inversiones comprometidas y, también, ofrecer las denominadas “unidades de trabajo” adicionales para lograr la extensión solicitada. Río Negro llevó adelante cuatro rondas licitatorias de áreas hidrocarburíferas que no habían sido adjudicadas por el gobierno nacional durante la década del 90. Recibió muchas promesas de inversión de empresas medianas y chicas, de capitales nacionales y extranjeros. A partir de la prórroga muchas firmas decidieron encarar planes de perforación, según confió a “Río Negro” una fuente del área energética.
Varias empresas titulares de permisos de exploración de áreas hidrocarburíferas de la provincia de Río Negro y adjudicatarias por concursos públicos nacionales e internacionales, solicitaron al gobierno provincial la extensión de plazos para ejecutar trabajos de exploración comprometidos oportunamente, al tener en cuenta distintas situaciones económico-financieras desfavorables, especialmente los efectos de la crisis internacional del año pasado. Si bien los requerimientos fueron expuestos al menos por tres empresas petroleras hace un tiempo, recién el 2 de marzo pasado –con vigencia a partir de la semana pasada- el gobierno rionegrino autorizó la suspensión por un año del plazo de cumplimiento de las obligaciones derivadas de los concursos. La medida se instrumentó a través del decreto 90, firmado por el gobernador Miguel Saiz y por el ministro de Producción, Juan Accatino, y difundido en el Boletín Oficial. Entre otras extensas consideraciones, el instrumento oficial puntualiza que luego de la evaluación de los fundamentos que motivan las solicitudes de los titulares de los permisos de exploración, se ha podido establecer que “las causas no se circunscriben a casos y circunstancias propias de las áreas involucradas, sino a la concurrencia de una serie de factores de carácter general que han alterado profundamente las relaciones económico-financieras de dichas empresas y que tienen el común denominador de ser ajenas a las mismas”, según difundió la agencia ADN. Cumplimiento de inversiones El período de prórroga es de un año calendario por período y para acceder a ese criterio las empresas permisionarias –al finalizar el plazo de exploración- deberán haber cumplido con la totalidad de las inversiones comprometidas y, también, ofrecer las denominadas “unidades de trabajo” adicionales para lograr la extensión solicitada. Río Negro llevó adelante cuatro rondas licitatorias de áreas hidrocarburíferas que no habían sido adjudicadas por el gobierno nacional durante la década del 90. Recibió muchas promesas de inversión de empresas medianas y chicas, de capitales nacionales y extranjeros. A partir de la prórroga muchas firmas decidieron encarar planes de perforación, según confió a “Río Negro” una fuente del área energética.
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