Floreció el césped y Cipo vive su primavera

Hace poco más de un año, el Club Cipolletti tomó la decisión de afrontar el regreso al césped natural en La Visera de Cemento. Los complejos trabajos que eran necesarios y la costosa inversión no fueron un impedimento. La oportunidad de volver a los orígenes era inmejorable y el Albinegro la aprovechó.

El esperado retorno fue el 29 de agosto último, frente a Bolívar por el Federal A. Cipo ganó 2 a 1 y la fiesta fue completa.

El anhelo de ver el renovado campo de juego se sumó a la buena campaña del equipo y a los 17 meses sin ser local en La Visera, entre la suspensión por la pandemia y la duración de la obra.

El regreso oficial del público a la cancha se daría el próximo domingo contra Camioneros. Sin embargo, ya se permitió la venta de entradas en la final de ida de la Liga Confluencia contra Deportivo Roca, en una noche de viernes con tribunas casi repletas, como en las mejores épocas.

El hincha albinegro tuvo un rol clave en la vuelta al pasto natural. En primer lugar siempre dejó sentada su postura contra el sintético y a favor de este cambio. Sin esa actitud difícilmente se hubiera avanzado en el tema.La participación también fue económica a partir de la compra simbólica de metros cuadrados que sirvieron para costear los trabajos.

Uno de los símbolos del plantel es Lucas Mellado. El volante surgido en el club llegó a jugar en el césped original antes del cambio aunque en Liga y no por torneos federales. Su debut en el entonces Argentino A fue con el sintético por lo que este regreso es doblemente especial.

“Estamos muy contentos, muy felices por el esfuerzo que hizo el club para que La Visera vuelva a ser la de siempre. Esperando los partidos que se vienen que son decisivos para pelear hasta lo último el torneo”, aseguró el mediocampista.

El “Negro” es una pieza fundamental en el equipo de Gustavo Raggio. A su despliegue y visión de juego característica le agregó gol. Ya lleva 8 tantos en este campeonato y es el segundo máximo anotador detrás de Juan Pablo Zárate.

“Es una cancha grande y tiene un buen piso, eso nos sirve mucho para la forma que tenemos de jugar, sacamos ventaja. Lo vamos a poder aprovechar al máximo en las instancias que quedan”, afirmó.

Uno de los grandes responsables del retorno al suelo histórico fue Henry Homann. Ídolo desde hace mucho, acrecentó aún más el cariño de la gente al ponerse la obra al hombro. Insistió para que se hiciera, acercó un proyecto y encabezó las tareas en la cancha.

“El Ruso es una persona gigante acá en el club. En mi caso fue él el que me llevó de la Liga al Federal cuando era el técnico. Jugué mucho con él, me hizo capitán. Significa mucho para la gente y para mí también, le estoy muy agradecido. Todo el amor que le pone y lo que hace por el club es increíble”, comentó Mellado.

El día del debut en el nuevo campo de juego, a fines de agosto, el presidente del club, Pedro Gutíerrez, valoró el apoyo de todos los que participaron en este proyecto y, además de mostrar su alegría, destacó el sentido de pertenencia que tiene el club.

“Es una alegría muy grande, esto es trascendental para lo institucional y deportivo. Esto además está marcado el sentido de pertenencia que tenemos todos, esto no lo ha hecho solo la directiva. Han colaborado empleados del club, actuales jugadores, ex jugadores, hinchas”, valoró Gutiérrez.

Como en los tiempos dorados, Cipolletti es protagonista en un torneo federal y con césped natural en su estadio. El Albinegro vive su propia primavera.