Gordos y flacos

Entramos con el gordo Boedo al Senado de la Nación y un empleado nos frenó con delicadeza…

– Señores…

– Venimos a ver al senador Antonio Cafiero…

– Un momento por favor, ya les indico en qué sector está el senador- respondió y computadora mediante y mientras murmuraba «Tony», «Tony», volvió con la respuesta…

– Senador Cafiero…Sector Manos Pulcras, Area Libre de Sobres Sospechosos…señores, pueden ubicar al senador avanzando por la derecha hasta la zona donde están los Ascensores para Inmaculados. Tercer piso señores….¡y vayan tranquilos!…buenos días- dijo el empleado y el gordo Boedo sintió la necesidad de sacarse dudas…

– Perdóneme, señor, ¿por qué tenemos que ir tranquilos?…

– Bueno, claro…En el sector donde tiene sus oficinas el senador Cafiero no les van a pedir nada…ni para transitar ni para nada…

– ¿Y qué nos podrían pedir…los documentos?…

– ¡No señor, no!…Acá en el Honorable Congreso de la Nación no sospechamos de los ciudadanos que vienen de la calle…sospechamos de los que están adentro…¡Pero que quede entre nosotros señores, por favor!…

– Claro, claro…¿Pero entonces qué nos podrían pedir?- pregunté…

– Bueno, en fin…en otros sectores de la Cámara les pueden pedir…en fin…un sobrecito con… En fin…algunas pelas…¡La vida está dura para algunos senadores!- respondió el empleado…

– Claro, claro…

– ¡Pero no se preocupen, en el sector del senador Cafiero no…

– Y dígame, ¿tendremos que hacer mucha cola para tomar los Ascensores para Inmaculados?…Estamos apurados…

– ¡No señor, no!…¡No hay cola!…

– ¿Por?

– ¡Porque aquí en el Senado de la Nación los inmaculados no abundan, señor!…¡En cambio hay otras zonas de ascensores que están repletas de senadores, secretarios de los senadores, etc., etc.!- reflexionó el empleado…

– ¿Qué sectores?- interrogue…

– ¡Bueno, es el sector con mayor cantidad de oficinas de senadores!…

– ¿Y cómo se llama ese sector?…

– En realidad, el nombre lo tiene que poner la Asamblea Legislativa…Se están barajando varios nombres, pero todavía no hay acuerdo – señaló el empleado…

– ¿Qué nombres?…

– Ustedes me inspiran confianza, señores…se los digo en confidencia: hay quienes dicen que debe llamarse Sector Soborno…Y quienes insisten en que hay que ponerle Sector Cometa…Pero hasta que se defina este tema, los empleados le pusimos nombres provisorios…todo para facilitar la mecánica de nuestra labor- acotó el empleado…

– ¿Y qué nombre les pusieron?…

– Sector Sobre Grande y Sector Sobre Chico…

– ¿Sobre Grande y Sobre Chico?….

– Sí señores, parecen extraños pero los nombres tienen su fundamento…

– ¿Cuál es?…

– Bueno, como su nombre lo indica, en el Sector Sobre Grande están los senadores que reciben los sobres más grandes; en el Sector Sobre Chico, los que reciben los sobres más chicos…

– Claro, claro…Un tema de sobres más gordos y de sobres más flacos…

– ¡Bingo, señor, bingo!…¡Pero siempre sobres, señor…¡Que más gordito y más flaquito, pero la vida de estos sectores siempre es un sobre!…Son sectores con gente muy ávida de…Miren señores, incluso yo voy a esos sectores, dejo la billetera aquí en mesa de entradas- dijo el empleado y con el gordo Boedo rumbeamos para el sector de Cafiero sin mirar para los costados…

Eduardo Gilimón


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