GUERRA A IRAK: Acuerdos para controlar los saqueos y la violencia que se extendían en Irak 12-4-03
Vacío de poder, luchas por el poder
El día en que Alí Babá se adueñó de las calles de Bagdad
EE. UU. ordenó «perseguir, asesinar o capturar»
Rusia, Francia y Alemania insisten con la ONU
Tras la caída de Mosul, la mira aliada se posó en Tikrit
Para Bush, la victoria puede llevar a la reelección
Temen un aumento del terrorismo
Halliburton niega un contrato
Los hospitales de Bagdad son un caos, con muertos y heridos para quienes no hay suficiente atención. BAGDAD (AFP/Reuters) – Irak permanece al borde de la anarquía, con saqueos y arreglos de cuenta en Mosul, Kirkuk y Bagdad, mientras Washington va tomando paulatinamente el control del país y advierte a Siria que no colabore con los fugitivos del régimen iraquí. El teniente-coronel estadounidense Robert Waltemeyer, comandante de Mosul, declaró que la ciudad estaba bajo control de las fuerzas especiales estadounidenses y las tropas kurdas, aunque reconoció que todavía quedaban «algunos focos de resistencia». Mientras bombarderos estadounidenses continuaron atacando posiciones alrededor de Tikrit, el paradero de Hussein, sus dos hijos y los principales miembros de su gobierno seguía siendo un misterio. La guerra también continúa en el ámbito diplomático, con el presidente de Estados Unidos George W. Bush advirtiendo al gobierno sirio que espera «la completa colaboración» de Damasco para «hacer todo lo posible» para cerrar sus fronteras a los seguidores de Saddam Hussein y capturar a aquellos que ya se han refugiado en ese país. Representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y oficiales de los marines de los EEUU acordaron ayer que estos últimos se desplegarán en varios distritos de Bagdad para detener los saqueos que se suceden desde el miércoles y reestablecer el orden en la capital iraquí. La violencia y el pillaje también se ha apoderado de las ciudades del norte Mosul y Kirkuk. El acuerdo se alcanzó ayer por la tarde en la capital iraquí después de horas de conversaciones entre ambas partes. Se desconoce hasta el momento cuándo comenzarán a desplegarse los marines con ese fin por los barrios de Bagdad, una ciudad de más de cinco millones de habitantes, que han sido testigos del colapso de la ley y el orden por la desaparición de la autoridad central iraquí. Mientras tanto, milicias de autodefensa comenzaron a crearse en varios barrios de Bagdad para defenderse de los saqueadores, según señalaron corresponsales de France Presse. El pillaje ha llegado hasta el Museo de Arqueología, saqueado esta tarde. En los hospitales, los médicos se ven obligados a acudir y trabajar armados. Según testigos citados por esta agencia, soldados estadounidenses mataron a un comerciante que defendía su tienda de los saqueadores. Le acusaron falsamente de ser un «fedayín» de Saddam Hussein. Al menos 25 personas han resultado heridas en las últimas horas. Los hospitales no dan abasto. Los saqueos y la violencia también se ha apoderado de las ciudades del norte Kirkuk y Mosul, y de Basora, en el sur. La caída de estas ciudades a manos de las tropas estadounidenses lleva consigo la pérdida de autoridad, hasta que alguien, como en Bagdad, se haga cargo de controlar el cumplimiento de la ley y el orden. En Basora, los británicos están negociando la posibilidad de celebrar el próximo domingo una reunión con dirigentes locales para intentar restaurar una autoridad civil en la ciudad. Ayer las tropas británicas mataron a cinco pistoleros que intentaron atracar un banco en Basora. Por el momento las agencias de las Naciones Unidas mantienen contacto con el Ejército de EEUU para tratar cuestiones de seguridad y logística. El hospital Al Kindi, el mayor de Bagdad situado en el este de la ciudad, que fue saqueado, dijo haber admitido a 25 personas heridas de bala en enfrentamientos con ladrones pero añadió que carecía de los medios necesarios para operarlas. Bagdad sigue siendo «un lugar peligroso», declaró el general del ejército del aire Victor Renuart, según el cual las fuerzas anglo-estadounidenses «cubren entre 50 y 60% del territorio iraquí». El secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld declaró que las fuerzas anglo-estadounidenses intentarán detener los saqueos. «Creemos tener la obligación de asistir y garantizar el orden y eso es lo que hacen las fuerzas de la coalición. Están patrullando varias ciudades, donde ven saqueos los detienen. Y continuarán haciéndolo», afirmó. Por ello, el departamento de Estado anunció que enviará en las próximas semanas a unos 1.200 policías y expertos judiciales a Irak para ayudar a restaurar el orden en el país. Por su parte, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) teme que la anarquía lleve a los iraquíes a intentar refugiarse en el extranjero. El paradero del presidente iraquí Saddam Hussein seguía siendo un misterio. Para el comandante de las operaciones militares aliadas en Irak, el general Tommy Franks, Saddam Hussein y sus allegados «están muertos o huyeron como conejos». En San Petersburgo, el presidente ruso Vladimir Putin, que recibía al presidente francés Jacques Chirac y el canciller alemán Gerhard Schroeder para hablar sobre su actitud tras la victoria estadounidense en Irak, saludó «la caída del régimen de Saddam Hussein» al tiempo que lamentaba las víctimas y la destrucción del conflicto. Los tres dirigentes subrayaron el «papel central» que debería desempeñar la ONU en el Irak de posguerra.
Enviarán 1.200 policías y expertos en seguridad WASHINGTON (AFP).- Estados Unidos quiere enviar a Irak en las próximas semanas cerca de 1.200 expertos en seguridad pública para ayudar a restablecer el orden en ese país tras el fin de la guerra, anunció el gobierno de ese país. El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, restó importancia a los saqueos que tienen lugar en Bagdad y señaló que son lamentables pero comprensibles, al tiempo que prometió que la fuerza de la coalición garantizará la seguridad. «Sentimos la obligación de contribuir a garantizar la seguridad», afirmó Rumsfeld, consultado sobre la razón por la cual el Pentágono no previó detener la anarquía inmediatamente. Según Rumsfeld, los saqueos generalizados aunque «lamentables» son transitorios y representan la consecuencia del pasaje de un régimen dictatorial a otro de libertad. El portavoz Richard Boucher precisó que un grupo de 26 responsables policiales y judiciales estadounidenses será el primero en partir hacia Irak y estarán bajo el mando de la Oficina de Reconstrucción y Asistencia Humanitaria, dirigida por el general retirado Jay Garner. «Harán sugerencias sobre la manera de poner en caja la seguridad y la policía local», explicó a la prensa. Según el portavoz. Washington está a punto de firmar un contrato con DynCorp, una sociedad privada de consultores en seguridad pública con base en Virginia (este), para enviar otros 150 expertos. Boucher afirmó que el presidente George W. Bush solicitó al Congreso una extensión del presupuesto para financiar el envío de 1.000 policías y juristas suplementarios para ayudar a restaurar el orden el Irak.»Estas personas harán sus recomendaciones, proporcionarán consejos, ayudarán a los habitantes a organizarse «
Vacío de poder, luchas por el poder
El día en que Alí Babá se adueñó de las calles de Bagdad
EE. UU. ordenó «perseguir, asesinar o capturar»
Rusia, Francia y Alemania insisten con la ONU
Tras la caída de Mosul, la mira aliada se posó en Tikrit
Para Bush, la victoria puede llevar a la reelección
Temen un aumento del terrorismo
Halliburton niega un contrato
Vacío de poder, luchas por el poder
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios