Habilitaron el tránsito por la ruta «Chica» en el Puente 83

CIPOLLETTI (AC).- La ruta «Chica» ya está habilitada al tránsito. Los operarios terminaron de construir el pequeño puente por la remodelación del sistema de riego y ahora sólo restan tareas a la vera de la calzada, que no significarán una nueva interrupción vehicular.

Los primeros automóviles comenzaron a pasar a las 19 del lunes, apenas los trabajadores desobstaculizaron los dos carriles a la altura de Puente 83. Ayer la ruta 65 ya había vuelto a ser una alternativa para quienes se desplazan entre Allen y Cipolletti.

Durante casi un mes los valletanos se vieron obligados a transitar por la nacional 22 (con todos los riesgos que ello significaba por el incremento vehicular) o bien debían utilizar los desvíos de tierra que se habían programado por la zona de La Falda.

Es que el Departamento Provincial de Aguas debía avanzar con la obra de remodelación del sistema de riego que inició hace tiempo, y a la altura del barrio cipoleño Puente 83, tenían que realizar un pequeño puente sobre la ruta para poder continuar.

No había otra opción que paralizar el tránsito porque debían romper el pavimento para construir el nuevo paso.

Con esta obra, ahora quienes se desplazan desde Allen a Cipolletti por Puente 83 se topan con tres puentes: el nuevo (que es de pequeñas dimensiones comparado con los otros dos), el del canal de riego y el del desagüe PII.

Los trabajadores estaban ayer pintando las barandas que se colocaron para prevenir accidentes ante esta nueva obra. La repavimentación en ese sector estaba lista.

Según comentaron, ahora continuarán las tareas a la vera de la ruta. Estiman que les demandará «entre un mes y mes y medio más» de labor en el lugar. «No se va a volver a cortar la ruta», se informó ayer.

Una pequeña senda peatonal se construyó junto a las barandas (en los dos carriles) para que la gente de Puente 83 pueda desplazarse con menos riesgo por ese sector.

A raíz de esta obra, la ruta 22 se había vuelto a congestionar muchísimo, como ocurrió cuando se realizó la repavimentación de la ruta 65.

Muchos usuarios preferían no recorrer los kilómetros de tierra del trayecto por La Falda y se desplazaban por la ruta nacional, que se había tornado mucho más peligrosa.

En los horarios pico, los riesgos de accidentes eran mayores.