Hasta las lágrimas

ALLEN (AA).- Hacía muchos años que un ciclistas de la región no se quedaba con la Vuelta. Y el encargado de cortar esa mala racha fue Cristián Ranquehue (29), el barilochense de Luz y Fuerza que ayer hizo emocionar a más de uno hasta las lágrimas. Ni bien se bajó se la bici besó a su pequeño bebé y a su mujer. También a su mamá. Después y en medio de una alegría incontenible, Ranquehue habló con la prensa y como era de esperar, por su sacrificio y su humildad, no dudó en compartir la victoria. “Estoy feliz. Este es un triunfo de la región, para Río Negro y Neuquén. Tantas Vueltas que se hacen y se las lleva la gente de afuera, creo que hoy (por ayer) además de ganar yo y Luz y Fuerza, ganó esta zona y Allen que tanto hacen por el ciclismo. Tuvimos un invierno duro pero a pesar de ello me preparé mucho física y psicológicamente, me tenía mucha fe y antes de salir para acá le dije a mi señora que venía a ganar la Vuelta”, expresó. Ranquehue volvió a agradecerle a todo su equipo: “Son un grupo de profesionales que me dieron apoyo, fueron ocho titanes, que se pusieron la carrera el hombro”.