Identifican a ex policía que actuó de civil en la «masacre de Avellaneda»

Celestino Robledo ya no pertenecía a la Bonaerense, pero igual les daba órdenes a los uniformados

BUENOS AIRES- Aurora Cividino, herida de bala durante la represión del 26 de junio de 2002 en el Puente Pueyrredón, identificó ayer a uno de los policías que actuó de civil en la «masacre de Avellaneda», durante la séptima audiencia del juicio oral y público que se sigue por los asesinatos de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.

La mujer, que se sumó a las declaraciones de Sebastián Conti y Walter Medina, otro dos heridos ese día, aseguró que el ex suboficial Celestino Robledo actuó de civil y que lo identificó debido a las órdenes que impartía al resto de los uniformados y las advertencias a los medios de comunicación. «Rájense, rájense», se escucha a Robledo en una filmación del Ojo Obrero -un documental del Polo Obrero- que se proyectó durante el juicio, aunque no se vio con certeza si el ex suboficial daba órdenes a los policías o increpaba a los medios de comunicación que estaban allí ese día.

La Policía Bonaerense quedó así más complicada tras los relatos que se recogieron durante la séptima jornada del juicio que se sustancia en el Tribunal de Lomas de Zamora por los asesinatos de Kosteki y Santillán.

Sebastián Conti, otro de los heridos ese día que vio a «personas de civil» que llevaban chalecos antibalas similares a los que usa la Policía, aunque no identificó a Robledo como uno de los participantes.

El debate en torno del accionar de Robledo giró a partir de las declaraciones de Cividino, herida con perdigones de plomo en las cercanías del hipermercado Carrefour.

También se proyectó el video donde se ve al ex efectivo dando órdenes y llevándose presuntamente a un piquetero detenido, cuando el suboficial ya no formaba parte de esa repartición. Robledo está imputado en el juicio por usurpación de títulos y honores, ya que aunque aquel día ya no pertenecía a la fuerza de seguridad, se habría desempeñado en la fuerza bonaerense.

Cividino identificó a Robledo como un «policía de civil» y dijo que el día de la masacre «vestía un jean con una campera de policía», aunque en uno de los videos se lo ve con una campera azul y no se observa insignia alguna.

Robledo quedó más comprometido aún por los videos de Canal 7 y el Ojo Obrero, que se proyectaron en la audiencia. Una cinta capta al ex policía cuando se acercaba a la mujer y echaba a los medios de comunicación, mientras parecía ordenar a los policías que pidan un paramédico.

El video de Canal 7 proyecta a Robledo cuando lleva, junto con un policía, a un piquetero del cuello, supuestamente en condición de detenido, detrás de la línea policial.

Cividino señaló que Robledo ordenó a un médico que la atendía que se retirara del lugar. La mujer estuvo internada durante 20 días en el hospital Fiorito, aunque no supo decir quién disparó el arma, ya que se estaba de espaldas.


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