Iglesia pide un liderazgo “sin demagogias”

Lo afirmó ayer el obispo Casaretto

BUENOS AIRES.- El presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, obispo Jorge Casaretto, advirtió ayer que desde “el Estado” se intenta ocultar la realidad de la pobreza porque “no genera votos”, y reclamó un nuevo liderazgo “sin populismos ni demagogias”. “Por distintos interés, desde el Estado, se intenta ocultar la realidad de la pobreza, porque no genera votos”, aseveró ante dirigentes sociales y políticos de las diócesis del conurbano bonaerense. Además, remarcó que “el nuevo liderazgo no se conforma con la gestión de urgencias, ni con populismos ni demagogias, sino con obras concretas orientadas al bien común”. El obispo hizo estas afirmaciones durante la jornada social de la región Buenos Aires que se desarrolló ayer en el colegio Beato Juan XXIII, de la ciudad bonaerense de Ramos Mejía, con el lema “Por una patria con justicia y solidaridad”. En ese marco, Casaretto dijo estar “impresionado” por la cantidad de jóvenes que fueron a despedir al ex presidente Néstor Kirchner, observación que le llevó a reflexionar: “Es novedoso, pero es posible que hayan encontrado a un nuevo líder”. El prelado demandó, además, “una rehabilitación ética de la política” y aseguró que “en un tiempo existencial, pragmático y de fuertes personalismos, necesitamos volver a los princi- pios”. No obstante, aclaró que “los principios tienen validez si solucionan los problemas de la gente”. Tras afirmar que “un buen dirigente es un hombre de diálogo, pero de un diálogo que busque consensos”, sostuvo que “todo su testimonio le da un sentido a sus principios, porque un buen dirigente hace feliz a la gente”. Finalmente, Casaretto consideró que “si el siglo IXX fue el de la libertad, el XX el de la igualdad, el XXI debería ser el de la fraternidad, y de esto somos expertos los cristianos”.