Imponente desalojo de puestos de “La Saladita”
Unos 10.000 espacios de venta clandestina fueron levantados y reubicados por orden de un juez federal, en el marco del plan de saneamiento del Riachuelo. Actuaron 1.000 efectivos.
Télam
En el “operativo traslado” participaron 420 gendarmes y 580 policías bonaerenses. No hubo incidentes.
DyN
BUENOS AIRES.- Unos 400 gendarmes y 500 efectivos de la Policía Bonaerense realizaron ayer un gigantesco operativo para levantar unos 10.000 puestos de venta clandestina en la feria conocida como La Saladita, un asentamiento que se creó en la vera del Riachuelo y en algunos casos en terrenos ganados al río sobre pilotes, en las inmediaciones de la popular feria La Salada de Lomas de Zamora.
El operativo se dio en el marco de una decisión adoptada por el juez federal de Quilmes, Luis Armella, a quien la Corte Suprema le delegó la tarea de controlar el proceso de saneamiento del Riachuelo, y por el cual se viene trabajando en el desalojo de todos los asentamientos ubicados a la vera del Riachuelo para construir el denominado camino de sirga, que según fija el Código Civil, todo curso de agua debe tener en su vera un mínimo de 35 metros de ancho liberados de toda construcción.
La iniciativa también, persigue liberar la calle para concluir la construcción de la vía rápida que conectará Camino Negro con la Ruta 4, una obra estratégica que contempla la pavimentación en hormigón de 2.600 metros lineales y que le dará al municipio otra vía de acceso rápida.
El desalojo de los más de 10 mil puesteros incluye su traslado a otro predio y fue negociado por el municipio de Lomas de Zamora que tuvo a su cargo las tareas de remoción de los puestos.
“Cada una de las personas que están trabajando ilegalmente en esta feria fueron, previamente, asistidas legal y socialmente”, afirmó el intendente local Martín Insaurralde. A lo largo de más de 20 cuadras, desde La Ribera al 2.200 y hacia Camino de Cintura, a partir de las 5 de la mañana, más de 550 cooperativistas y 200 empleados comenzaron a desmontar los puestos, bajo la atenta mirada de cientos de gendarmes y policías que custodiaban el predio.
“El trabajo de las fuerzas que participaron y siguen participando ha sido extraordinario. Fue precautorio, no hubo que intervenir. Sólo se realizó un cordón en el lugar para que el personal municipal pueda trabajar. Hay que resaltar que fue un esfuerzo coordinado que se llevó adelante, de manera excelente, entre los gobiernos nacional, provincial y municipal”, afirmó por su parte el ministro de Seguridad bonaerense Ricardo Casal.
En ese predio, conocido como “La Saladita”, funcionaban unos 10.000 puestos de venta ambulante y tras un consenso entre los feriantes y las autoridades, se dispuso el traslado de los mismos a la feria Urkupiña, que forma parte del complejo La Salada, según informó la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo.
Se trataba de una de las acciones más complejas desde lo social, en el trabajo que se viene realizando para sanear el Riachuelo y liberar su ribera. La importancia de la iniciativa que afectaba fuertes intereses económicos, la marcó la presencia de funcionarios de primera línea.
Presenciaron el operativo el jefe de Gabinete Abal Medina, el ministro de Seguridad bonaerense Ricardo Casal y el intendente Martín Insaurralde.
En el “operativo de traslado” participaron unos 420 efectivos de Gendarmería, para custodiar el perímetro, y la puesta a disposición de unos 580 efectivos de la Bonaerense para el seguimiento del procedimiento, el cual se realizó en forma pacífica”.
Télam
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