Incluirían el “hospitalito” en el presupuesto 2012

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La ministra de Salud, Cristina Uría, se comprometió a gestionar ante la secretaría de Obras Públicas rionegrina la definición del proyecto edilicio del “hospitalito del Alto” y la elaboración del presupuesto de obra para incluirlo en el presupuesto provincial 2012. La noticia fue recibida con satisfacción por los dirigentes de una docena de juntas vecinales de la zona Sur que transmitieron a la funcionaria las deficiencias de los servicios de Salud Pública en la ciudad y le pidieron que revierta las dificultades para la obtención de turnos y la falta de médicos, tanto en el nosocomio como en los centros periféricos. “La ministra se llevó un buen panorama”, aseguró la presidenta del barrio 28 de Abril, Elizabeth Rivera, en referencia a las quejas de los vecinos, al tiempo que calificó de “buena noticia” el espaldarazo que dio la funcionaria al proyecto de instalar un hospital de complejidad tres en la Pampa de Huenuleo. Ribera explicó a “Río Negro” que las organizaciones vecinales avanzaron con dificultad después que la Cooperadora del “Ramón Carrillo” retiró el financiamiento que dio origen al proyecto y que el compromiso de Salud Pública dio nuevo impulso a la iniciativa. “Los representantes de la Cooperadora dejaron de asistir a las reuniones del comité de emergencia desde mediados del año pasado y no dieron señales de querer sostener el financiamiento”, relató la dirigente barrial quien aclaró que sigue firme la asignación del terreno ubicado en Pasaje Gutiérrez y la ruta 40 Sur, que cedió la Cooperativa Quimey Hue. En el encuentro Uría le anticipó a los vecinos que tanto la estimación de inversión como los planos se pueden realizar a través de Obras Públicas y se comprometió a incluir el proyecto en el presupuesto 2012 que se elevará a la Legislatura en octubre. Por su parte la legisladora Graciela Di Biase prometió impulsar su aprobación. El proyecto del “hospitalito”, presentado por la Cooperadora del Hospital Zonal en 2003, sufrió una fuerte resistencia del Ministerio de Salud que no estaba dispuesto a proveer los recursos humanos y presupuestarios para garantizar su funcionamiento. La iniciativa original planteaba un centro hospitalario de complejidad IV con sala de internación.

El reclamo de los vecinos apunta a que el “hospitalito” ayudaría a mejorar la atención de la salud en la ciudad.