Industrias locales ya empezaron a parar personal

La crisis energética ya empezó a mostrar sus efectos sobre las industrias de la región, que suspendieron o planean suspender personal o directamente parar su actividad.

En Regina, la empresa Jugos SA suspendió a 70 operarios a raíz del corte de suministro de gas.

Desde la empresa elaboradora de jugos, concentrados y aromas, explicaron que la medida se adoptó debido a la falta de certezas sobre los plazos para el restablecimiento del servicio.

El grupo de 70 operarios que estaba trabajando en cuatro turnos rotativos estaba directamente vinculado a las tareas de elaboración de jugos, y recién se les notificará su reincorporación cuando se tenga seguridad de la vuelta del suministro.

Desde la empresa precisaron que hasta el momento no hubo ninguna comunicación sobre una fecha probable de entrega de gas para continuar produciendo.

Indicaron que solicitarán datos certeros sobre este tema, ya que en lo que va de este año en dos oportunidades sufrieron el corte del servicio.

Explicaron en este sentido que la puesta en marcha de la planta demanda unas 20 horas «y no tendría sentido convocar al personal si solamente se va a poder trabajar uno o dos días».

En Cipolletti, la situación no difiere demasiado: más de 60 personas deberá desafectar de sus tareas la empresa Embotellado Comahue SA a partir de las próximas horas, de su registro total de unas 300, a causa de la merma en la producción que le provoca el racionamiento del consumo de energía eléctrica de 18 a 22 horas.

Néstor García, presidente del directorio de esta empresa, la más importante en el sur del país en su tipo, dijo que el martes de la semana entrante habrá una reunión en Buenos Aires de la Unión Industrial Argentina, de la cual García es titular en Río Negro, donde se analizará el caso y las medidas a seguir como bloque.

En la empresa de García no es determinante el impacto de la merma del gas pero sí, obviamente, el energético, ya que es uno de los grandes consumidores de la zona.

Puso de relieve que a las 60 personas les dará vacaciones hasta que se normalice la situación y que por ahora no puede merituar en qué medida afectará su línea de producción el cese de 4 horas de consumo eléctrico pero sí confirmó que pese a los esfuerzos que se realizan para cumplir con los compromisos contraídos habrá una

disminución de los estándares normales de su línea productiva.

En Pollolin, la fábrica procesadora de pollos más importante de la Patagonia, la situación podría tornarse insostenible.

Fabián Maionchi adelantó que si los obligan a cumplir con las restricciones al uso de la electricidad directamente no podrán trabajar.

Aseguró además que aún no recibieron la notificación formal y que se enteraron de la medida a través de los medios de comunicación. «Estamos tratando de averiguar cuál es la situación porque no está muy claro si las restricciones son sobre la potencia contratado o sobre el consumo normal», aclaró ayer.

En tanto, Héctor Frías de Gregorio Numo y Werthein SA, informó que la empresa fue notificada de la medida a través de un correo electrónico, el miércoles cerca de las 14. En la nota, el gobierno nacional les comunica que deben bajar el consumo eléctrico desde las 18 hasta las 23. «Esto implica directamente tener que parar el horno de la fábrica porque en el proceso utiliza más electricidad que el máximo permitido», explicó. «Lamentablemente no fuimos avisados a tiempo y esto nos acarrea un perjuicio económico muy grande. Realmente la situación es muy complicada», reconoció el empresario dedicado al disecado de frutas.

Se mostró muy molesto por la medida del gobierno. Dijo que en un país donde los empresarios tienen que hacer lo imposible para generar puestos de trabajo «se hace todo al revés».

Incluso adelantó que la firma se está replanteando la puesta en marcha de nuevas inversiones porque dada la situación «son muy riesgosas». (AC/AVR)