Inoportuno

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner incorporó comillas a la palabra “vendido” en uno de sus tuits insinuando que el presidente de Chile, Sebastián Piñera, había simulado la venta de las acciones de la compañía LAN que estaban en su poder cuando accedió a la primera magistratura. El gobierno chileno salió indignado a aclarar que la venta de las acciones efectuadas por Piñera era real y no ficticia, por existir un “conflicto de intereses”. La aclaración de la cancillería chilena ha dejado mal parada a la presidenta argentina, que a pesar de tener una serie de inversiones empresariales en hotelería, nunca se desprendió de las acciones de esas empresas. Es más. Sus hoteles reciben una clientela constante suministrada por la empresa estatal Aerolíneas Argentinas, que obliga a la tripulación de las naves que viajan a Calafate a descansar en el hotel de la presidenta. Como se percibe, la idea que existe en Argentina sobre el “conflicto de intereses” es bastante más laxa que la que predomina en Chile.

Análisis