Invap defiende la construcción de un reactor

VIEDMA (AV).- El gerente general de la empresa Investigaciones Aplicadas (Invap), Héctor Otheguy, defendió el proyecto de construir un reactor nuclear de investigación en Australia y desestimó la campaña impulsada por la organización ambientalista Greenpeace que «sólo presenta la propuesta de desmantelar y esterilizar» a la empresa rionegrina.

Señaló que las políticas nuclear y ambiental «deben coexistir y armonizarse, sin incurrir en ninguna clase de fundamentalismo», al tiempo que lamentó la campaña mediática que podría perjudicar a una empresa que es la única en Latinoamérica con capacidad de diseñar y construir satélites.

Otheguy dijo que «la Argentina es un país nuclear que protege su ambiente» y destacó que INVAP es una empresa laboriosa y creadora que «alcanzó el mayor nivel mundial en el aprovechamiento de la energía atómica con fines pacíficos, en el campo de la medicina e investigación, y que en su tarea observa escrupulosamente las normas y estándares de seguridad internacionales».

De esta manera, la empresa salió al cruce de una campaña entablada por organizaciones ambientalistas que se oponen a la ratificación del acuerdo con Australia. Invap fue elegida por la Australian Nuclear Sciencie & Tecnology Organisation (ANSTO) para diseñar y construir un reactor nuclear de investigación que remplazará al actual que está en operación y que se destinará a la obtención de radioisótopos para uso medicinal e industrial.

El acuerdo sobre cooperación en los usos pacíficos de la energía nuclear debe ser ratificado por el Congreso Nacional para su plena vigencia. Ya fue aprobado por unanimidad en el Senado y se encuentra a consideración de la Cámara de Diputados.

En el pliego de licitación, Ansto requirió a todos los oferentes que indicaran si contaban con una estrategia adecuada para el tratamiento de los combustibles gastados por el reactor, fuera de Australia, pero para su disposición final en ese país.

INVAP manifestó que efectivamente cuenta con la estrategia requerida en el pliego y que consiste básicamente en tratar los combustibles usados en las instalaciones ya existentes en la Argentina o bien contratar el servicio de un tercer país.

En referencia a dictámenes de varios abogados constitucionalistas y de órganos de control del Estado nacional competentes en la materia, INVAP afirmó que «la operatoria propuesta no contradice ni la letra ni el espíritu de la Constitución Nacional siempre que los combustibles gastados, ya acondicionados, no permanezcan en nuestro territorio».