Investigan si se trató de un hecho intencional

Las autoridades del hospital creen que fue "un error muy burdo" que los residuos patógenos llegaran al basural. No descartan que "cuestiones internas" en la institución, estén detrás de este caso.

CIPOLLETTI (AC).- Las autoridades del hospital de Cipolletti no descartan que detrás del hallazgo de siete fetos y dos placentas, entre otros residuos patógenos, haya una intencionalidad. Tienen en cuenta otros incidentes que hubo meses atrás en el nosocomio para presumir que quizás «cuestiones internas» en la institución tuvieron algo que ver en tan macabro y peligroso episodio.

«Es muy burdo para que haya sido un error», dijo ayer Sergio Wisky, director del hospital. Comentó que si bien es cierto que no había bolsas rojas y que los desechos fueron colocados en las comunes, de consorcio, quien manipuló esos residuos tendría que haberse dado cuenta que no era basura común. «Llevaban líquido», precisó, recordando que en el interior se encontraban las placentas con un peso de unos tres kilos cada una.

Por eso, luego de un análisis más minucioso de lo sucedido, dentro del nosocomio se abrieron otras líneas de investigación.

Una hipótesis que se maneja, es que quizás las bolsas llegaron correctamente al sitio de residuos patógenos pero «alguien» (obviamente algún hospitalario porque el sitio no es de fácil acceso a otras personas) las pasó al sector donde se acopian las domiciliarias. Si se comprobará esto, la investigación tendría otro peso en la esfera penal.

Ayer las autoridades hospitalarias comenzaron a solicitar los descargos por escrito a cada una de las áreas presuntamente involucradas. Esta documentación será elevada luego a Viedma, trámite previo para el inicio de los sumarios.

Por otra parte, sigue instruyéndose la causa penal en el juzgado de Instrucción 21, a cargo de la jueza María del Carmen García García. Hoy, Wisky anexará esta presunción en el expediente.

El viernes por la tarde dos cirujas que revolvían desperdicios en el basural de Cipolletti se toparon con dos bolsas negras que contenían siete fetos, dos placentas, materiales descartables utilizados por al menos dos pacientes con sida, camisolines, envases de suero y jeringas, entre otros residuos patógenos.

El hallazgo generó conmoción en la ciudad. Pero en poco tiempo se supo de dónde habían salido: el hospital local.

Según se informó, en el proceso de mudanza a las nuevas instalaciones, las bolsas fueron a un lugar equivocado. Los fetos eran los que estaban en estudio en formol en el servicio de Anatomía Patológica. Por eso tanta cantidad.

El sábado Carlos Baruf, jefe de Médicos, salió públicamente a reconocer que los desechos pertenecían al hospital y consideró que se trató de «un grave error», al tiempo que prometió que se hará una investigación a fondo para determinar la cadena de responsabilidades.

Pero ahora, Wisky dejo abierta otra puerta en el caso. «Vamos a investigar si no hay cuestiones internas detrás de esto», mencionó ayer. Y luego fue más preciso: «vamos a investigar si no hubo una intencionalidad». Sostuvo que si es así, se verá quiénes son los responsables no sólo para que reciban la sanción que les corresponda sino también para que no vuelvan a suceder estos hechos.

La hipótesis se alimentó en base a otros episodios que ocurrieron en el nosocomio en los últimos meses: en una ocasión alguien desarmó un aparato del agua y los consultorios externos se inundaron; en otra, alguien cortó el oxígeno de un sector del hospital (afortunadamete no se afectó a ningún paciente porque lo detectaron rápidamente) y en una tercera, hubo un robo de computadoras. Ahora, los patógenos llegaron al basural.

'No fueron debidamente identificados como residuos biopatológicos'

VIEDMA (AV).- Los fetos encontrados en el basural de Cipolletti no fueron debidamente identificados como residuos biopatológicos. Este fue el error que, en principio, fue observado por el ministerio de Salud de Río Negro, que resolvió enviar un abogado a Cipolletti para ponerse a disposición de la Justicia y sumarse a la decisión de la conducción de ese hospital.

La secretaria de Salud de la provincia, Cristina Uría, destacó que el director del nosocomio entregó al juez interviniente todos los elementos que puedan ser probatorios para deslindar o determinar responsabilidades.

Confirmó que la ministra de Salud, Adriana Gutiérrrez, dispuso enviar a esa ciudad a un abogado de la dirección de Estudios Jurídicos de la cartera para ponerse a disposición de la Justicia, estar presente en el hospital cipoleño e iniciar desde el ministerio todas las acciones administrativas que sean necesarias.

La secretaria de Salud explicó que para tratar los residuos patógenos se utiliza una metodología distinta a la que se conoce como desechos domiciliarios. En principio, se deben colocar en bolsas especiales identificadas con el color rojo y de un espesor diferente para impedir la salida de líquidos u olores relacionados con material patológico. Además esas bolsas son depositadas en containers especiales diferentes de los de la basura común y son recolectadas por empresas que posteriormente hacen el tratamiento final del residuo biopatológico a través de la incineración en hornos pirolíticos.

Puntualizó que en el caso de Cipolletti la empresa que recoge los residuos patológicos del hospital y de las clínicas privadas los traslada hasta los hornos pirolíticos de Roca. «Aquí el error que se ha cometido es el de no identificar debidamente a estos fetos como residuos biopatológicos y mezclarlos como desechos comunes», sostuvo Uría.


CIPOLLETTI (AC).- Las autoridades del hospital de Cipolletti no descartan que detrás del hallazgo de siete fetos y dos placentas, entre otros residuos patógenos, haya una intencionalidad. Tienen en cuenta otros incidentes que hubo meses atrás en el nosocomio para presumir que quizás "cuestiones internas" en la institución tuvieron algo que ver en tan macabro y peligroso episodio.

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