Jaime Torres, un merecido cierre en La Angostura

VILLA LA ANGOSTURA.- El charanguista Jaime Torres, con acompañamiento coral, vocal e instrumental, fue el encargado del cierre, el jueves por la noche, de la Semana de la Música de Cámara que se llevó a cabo en Villa la Angostura, junto al lago Nahuel Huapi.

El magno evento clásico y popular de música que se inauguró el pasado jueves 7, fue auspiciado y organizado por la secretaría de Cultura de la comuna que preside Roberto Cacault, y la Fundación del Banco Provincial neuquino para lograr la concurrencia de prestigiosos intérpretes con la dirección artística del maestro Naldo Labrín, músico y compositor oriundo de Neuquén.

En diálogo con Télam y para presentar a los artistas de la clausura en el gran gimnasio local, el director Labrín manifestó que Villa la Angostura va a ser desde ahora, la sede de la Semana de la Música.

Así llegaron el jueves junto al sensacional Jaime Torres, los cantantes del Coro Municipal de General Roca, con teclados y la participación de Federico Siciliano y Diego Rolón en guitarras para la interpretación de la “Misa Criolla” de Ariel Ramírez, villancicos navideños y coloridos temas telúricos.

El nivel de calidad estaba planteado desde el momento en que con el liderazgo del intérprete norteño Jaime Torres, la universalísima composición de Ramírez escrita y modelada según cánones clásicos y genuinos autóctonos, llegó con su impacto en el soberbio “Kyrie” con su emocional “Señor, ten piedad”, una gema.

Llegaron luego el conmovedor Gloria y los concentrados segmentos del Agnus Dei, para sacudir los intérpretes con su impecable estilo musical en los versículos de “Cordero de Dios que quitas….”, una realización que sacudió a toda la audiencia.

Después vino el deleite de las chacareras, la samba chayera, el acordeón de Siciliano junto al charango de Torres para jugar con sus alucinantes rítmicos del chamamé, el carnavalito, el takirari y un soberbio tema folclórico venezolano que fue llevado al CD por el grupo.

Esta primera edición de Semana de la Música en la Angostura junto a las azules aguas del Nahuel Huapi y al pie de los imponentes Andes neuquinos con sus cumbres aún nevadas, trajeron el oxigenado aire de lo clásico junto a lo popular profundo, barroco, piazzolliano, romántico de todos los tiempos y para todos los gustos, que merece ser repetida en honor del gusto público. (Télam).